martes, 31 de mayo de 2011

El recuerdo era absentarse,trago a trago.

Amargor

De haber puesto “amacord” me estaria refiriendo a la película que Fellini rodó en 1973, justo cuando derribaron la Encarnación.
Como el amargor de la absenta, la bebida no significaba lo que recuerdo, que siempre se bebe para olvidar, y el amargor de aquella imagen del pasado, como a esta, a la que aun siendo la mas grande le pusieron el amargor de los mejores recuerdos junto a su boca, pues es sabido que lo que le amarga el culo es al pepino.
Todos a comer pepino. Todo político que se precie debería de estar comiendo pepinos para demostrar al mundo que un pepino en la boca no es que sea bueno, si no que está estupendo, pero como todo, sin abusar. Ya ven, hay quien quiere hasta los pepinos grandes.
La cosa es de nueve cifras, lo cual no es ninguna broma, y a diferencia con lo de la Encarnación de mis recuerdos, buenos recuerdos, esta que amarga como pepino en el culo, no hay quien se la lleve a la boca.
Acaso por eso preocupa que si de verdad estos estuvieran por el retorno de la estatua, que como se puede medir, es de mayor tamaño que la mas grande,y aunque el tamaño de siempre importa, seria imperdonable que uno de esos otros que andan sueltos con amargor en las venas de tanto “absentarse” los amargores laborales, y la abstinencia en carne, y no solo los viernes de cuaresma, que le diera al la “criaturita” por poner en los labios a la mismísima Diosa de la fruta y verdura, en lugar de un buen jamón para celebrarlo, un amargo pepino para que todos nos acordemos de quien posiblemente no tiene culpa de tener en su casa lo que la “pobresita” tiene.
A pesar de que estamos en el tiempo amargo de las despedidas, siempre quedaran pepinos para llevar a la boca, y lo mismo la gran pepinada, tiene su punto especial de austeridad para el cambio tranquilo, y hasta es posible que se abra la puerta que traiga a la mas grande de las esculturas que realizó Vasallo, esa que en los día amargos del derribo del vetusto edificio, cuando entronizada en la hornacina central de la fuente de piedra, protegía a los placeros que llegaban cargados con serones a las espaldas, como animales, para ir adelantando la faena, que habían iniciado horas antes en el Arenal, esperando los carrillos de mano, primero y luego los triciclos, y mas tardes los isocarros, y luego las dekauves, hasta llegar a las “furgonetas”.
El recuerdo no es amargo, el reculo de melón sí. El melón también sale pepino, ¿Y el pepino? A que sale. En origen ahora mismo lo estan tirando, y los políticos tragando pepino para las fotos.
Un pepino, por aquí, un pepino, por allí, pa,pa,pa,pa,, y parece mentira que ni los que hacenloimposiblepuntocom, aun no hayan advertido que lo que falta es abrir una puerta, y eso viene a decir que esto es como el culo del pepino, que depende del gusto, y para mi que acabaran abriendo.
Sevilla a 31 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez Estévez

lunes, 30 de mayo de 2011

La frase

A los hombres del futuro

No es fácil dejar nada sabiendo que tienes que dejarlo todo, y que al irte no te puedes llevar ni un sueño, ni una ambición, ni tan siquiera un deseo.
Nada, ni el destino puede acompañarte. Por muchas razones que tengas, sin puerta, no tienes nada. Solo, de nuevo solo.
Sin embargo, habiéndome enterado que esto de Internet, permanecerá durante siglos, (cambiando de tecnología y sistemas), seguiré guardando en los archivos de Microsoft por si algún día interesa, algo mas que a los lectores de hoy, esto que será como una nueva estela de Karnak donde quede la revelación del tiempo pasado, para que los hombres del mañana tengan, si es que le importa un pimiento, la opinión que de lo de la Encarnación tengo, y que para no llevarme tanto peso en las maletas de la memoria, y antes de que queden convertidas en cenizas, quiero dejarles.
Será por lo tanto un legado a los hombres del futuro. La visión real de lo que aconteció en la plaza de la mayor indignación. Plaza de la Encarnación de toda la vida, a la que quieren cambiar por mayor, cuando aquello no tiene nombre.
Plaza del quinceeme, plaza de la democracia real, plaza de las plazas, plaza, madre de todas las plazas, refugio de pecadores, vaso admirable, consuelo de los afligidos, Encarnación de mis canas, ¡Dime, que coño eres!
De nuevo Bertolt Brecht, acierta en su frase: El peor analfabeto es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas.
El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales".
Sin duda mucho mas interesante que la mas famosa, la de ahora vienen a por mi, que como todos sabemos no es suya, pues tal acierto corresponde a Niemoeller, (según dice Wikipedia).
A los hombres del futuro les dejo todo lo que conservo, aun sabiendo que no me lo puedo llevar a ningún lado por lo que pesa, pues de otra manera no podría ni yo mismo recordar, “la verdadera historia de la plaza de la mayor indignación”, por si desde Berlín vuelve el fantasma de Bertolt, y toma el argumento de las tres maletas, como si de “tres centavos” se tratara. “Seis setas, para una puerta”

Sevilla a 30 de Mayo de 2011 Día de San Fernando
( mi coche, con 32 AÑOS, como un machote, ha pasado la revisión ITV)
Francisco Rodriguez Estevez

domingo, 29 de mayo de 2011

De A.Gonzalez a Mayer, (una plaza, y eso)


Al futuro
(Mayo micologico)

Cuando apareció el banderín de enganche de los indignados, en lo de la Encarnación estos ya formaban grupos. Cuando empezaron a llegar los indignados a la plaza, sucedió como con el “diplodocus”, la indignación ya estaba allí.
Desde el principio del principio la indignación de lo de la Encarnación tenía toda la pinta de acabar como lo ha hecho. Indignante, pero cierto.
Y es que no había mejor solución que aquel inútil icono quedara definitivamente convertido, para todo el tiempo que dure en pié, en la plaza de la mayor indignación.
Mas con ironía que indignación, (gastada hace tiempo) aparecieron los gritos de carton, en el intocable formica. Los carteles indican el camino de los retretes, segunda puerta a la izquierda, pues así reza el texto del primero para aquellos que tengan que “dar de cuerpo”, (acaso lo único que pueden dar estos inquilinos), para que los indignados puedan hacer uso de los servicios públicos en el edificio privado.
El segundo señala con una flecha, “indignados arriba”, avisando de que allí encima, en la plaza privatizada, los indignados, como si fuera “café”, han tomado a la “res” publica, siendo res estabulada. El otro, indica que la ruina está abajo.
Pero basta mirar arriba y ver los tirafondos, la machihembré, las torsiones, y los desplazamientos de las maderas, junto las grietas de micro fisuras del cemento proyectado por un lado, y abajo, los puestos cerrados en la soledad de los desérticos viales interiores, por el otro, para caer en la cuenta de la importancia de aquella que, aparte de la Hispalis desubicada, se diría que en la calle sinuosa, la ruina, acaso por los extractores de su olor, también se le presagia.
La ruina es para muchos algo indignante, por la sencilla razón de que es de las pocas cosas que le sobra a los pobres, sin embargo, en ocasiones se encuentran algunos ricos pobres, y mas fácilmente se detectan a los pobres ricos.
La indignación ha colmatado lo de la Encarnación, llenando las escalinatas que suben hasta la plaza de la mayor indignación donde aun pernoctan, junto con la indigencia, los radicales. Abajo el cartel de indignación es informativo, “Efectivamente, aquí, falta una puerta”. Puerta al futuro.
Sevilla a 29 de Mayo de 2011
De plaza de España, a la de la mayor indignación, en marcha
Francisco Rodriguez

martes, 24 de mayo de 2011

"Efectivamente, aquí,falta una puerta

En la acampada

Efectivamente, y para ser justo con los tiempos de la democracia real, allí arriba está haciendo falta un par de piscina para hacer la estancia reivindicativa si no ideal de la muerte, al menos placentera.
En la sombra abierta de herida a colgajos, desangrándose en los intereses bancarios de costear el caprichoso icono, la juventud y la madurez, se han dado cita en la Plaza de la Mayor Indignación.
La carteleria, a falta de buenos “graffitis” dejan mensajes de una punta a la otra pasando por las escaleras, y las pancartas, gritos de telas,que despues de muchos día,aun ondean, aunque mustias, en las barandillas del micologico lugar.
En las bases de las fustas, en las llamadas P-3, y P4, conocidas por las macizas,por el hormigon de la cementera que pagó lo del MOMA, aparecen pegados los pliegos, los folios, las cuartillas, y holandesas que se llenan de palabras en la indignación de los indignados.
En la plaza de la mayor indignación, entiéndase en la azotea de lo de la Encarnación, la acampada no es botellona, basta ver lo limpio que se mantiene aquello. Tampoco es un campamento de verano, en cuyo caso la concesionaria estaría ejerciendo su explotación.
“Explotadores, especuladores, políticos corruptos, bancos y cajas, trabajadores holgazanes, funcionarios que no funcionan, profesores que no enseñan, periodistas que no informan”, todos tienen un trocito de papel dedicado en la plaza de la mayor indignación.
Debajo del espacio tomado y que gentilmente cede la concesionaria de lo de las setas, los subarrendados de pago no pueden expresar nada, ni se les permite poner un mínimo cartel en el que se diga(como informacion al publico) que los retretes los pueden encontrar en la segunda puerta a la izquierda, o este que cada día es retirado por el analfabetismo obligado de la sumisión, “la acampada es arriba”, y este otro “ La ruina está abajo”, por no seguir con aquel que pocos entendía “luz fría, casi de muerto”, y el mas reciente “Esta luz dá mu malita cara”, y este de pura logica que dice, “Efectivamente, aquí, falta una puerta”,, y el mas reivindicativo de “Ceres, vuelve”.
Uno, que forma parte del primer reemplazo de indignados, como que le cuesta entender como ese espacio publico, que ahora convertido en la plaza de la mayor indignación está privatizado, ha podido quedar por contrato, nada menos que durante 40 años en manos de una empresa constructora, a su vez adjudicataria, y concesionaria, a la que se le abona cantidad sustanciosa, por alquilar al propio Ayuntamiento, (nada menos que un edificio municipal).
Lo mismo, el indignado se cree que aquel suelo es suyo, y mantiene en actitud cívica, como la “macellum argentaria” mantiene limpio ese monte de escalinatas donde acampa el batallon de guardia, mientras otros cantan, otros esgrimen argumentos de soluciones utópicas, y otro piensan que pueden escribir en los carteles que no se haya dicho con anterioridad, y al igual que abajo puede leerse “Efectivamente, aquí, falta una puerta” a nadie se le escapa lo bien que vendrían un par de piscinas.
Cierto es que el muy animal no sabe leer, pero basta saber que hasta un candidato advirtió que "efectivamente, aquí falta una puerta".....(puede venir comprobarlo)
Sevilla a 24 de Mayo de 2011
Francisco Rodriguez Estevez

sábado, 21 de mayo de 2011

El arbolito se esta haciendo grande

Para Basilio Moreno

La pequeña placita

Alejándome de la plaza de la mayor indignación, esta se encargo de hacerme ver que en cualquier plaza ella persiste, en cuyo caso lo aconsejable era pasar por el ahro.
En la pequeña placita donde crece el ambiente, tambien ha crecido la catalpa.
Tomada la calle, el escenario montado era ideal para salsa y sevillanas, nada de discursos. En el triangulo de la celebración, que fuera campo de desolación, ahora convertido en parque infantil, la sombra de la amable catalpa se ha hecho alargada, en el fondo, y a lo ancho, la barra improvisada de un bar suministraba las viandas en la cruz que sin ser Cruz de Mayo naturalmente, es la cruz de la encrucijada callejera, donde además de la calle, los vecinos se toma la de la cruz del campo, en esta velada de concentración de gente feliz del barrio obrero, tan indignadas como cualquier indignado de la plaza mayor de la indignación, pero con música en directo.
“Nadie siembre en la Pintada, que es para un sueño”, y justo allí, donde el solar permanece sumándose a aquellos otros que antes, desde hace un siglo, fueran casa de baños y centro de asistencia, y como adelantados en el tiempo de la indignación fueron convertidos en vacíos. En este que nos ocupa, la catalpa ha crecido y el cable de tendido eléctrico, judas permanente, besa los corazones verdes de su hojas para que como la Encarnación acabe en madera, “al que yo bese, ese es”.
Hace cinco años, cinco, el concejal con responsabilidad de la llamada irresponsable, edil sumiso abducido de los movimientos ciudadanos, un lobo, al que encabritaron con piel de chivo, con la “cruz en la mano” sentenció que aquel pequeño arbolito había sido mal plantado, una predicción realizada sin mirarse, posibilitando que lo mas seguro fuera que la tala le llegara antes de que alcanzara los cables aéreos del tendido eléctrico que, como todo irresponsable en la responsabilidad, ni se le había ocurrido pensar que la alta tensión tiene que estar soterrada.
Aun tenia el eco de los mensajes que en millares de voces gritaban en escalera partida, que ambos era una misma mierda, y la cacosmia producía el recuerdo de tanto mojón, que muchos llaman hito, cuando el hito de la plaza era de la mayor indignación, y en la pequeña placita donde crece la catalpa la indignación es que el negro cable que nadie retira pueda tener las peores consecuencias si a uno de estos, que salen como zombis de las "urnas" en lugar de ordenar a la gran empresa que cumpla con lo establecido, lo mismo ordena lo contrario, y la indignación seguirá gritando Oé, oe, oe, la misma mierda es, pero sin árbol.
Sevilla a 22 de Mayo de 2011
(elecciones municipales)
Francisco Rodriguez Estevez

Plaza de la Indignacion (Ya sabes)

Plaza de la Indignación

Si aquello desde el principio me mantenia idignado, ahora son muchos los que tomando la plaza nos indican su indignacion, sean por otras cosa, por motivos diferentes, pero al fin y al cabo la Encarnacion se ha conocido mundialmente, no por las setas, ni por su mercado emblematico, ni por la sostenibilidad inexistente, a partir del 15-My, aquello es la "PLAZA DE LA MAYOR INDIGNACION".
Me fui a escuchar otra cosa mariposa. Hubiera sido igual pero se obstinaban en decir que era diferente cuando era más de lo mismo.
Mientras las demás comunidades, incluidas las diferentes, se distinguen por los resultados que obtienen, en esta comunidad, de por si manipulable, a estos que quieren distinguirse diciendo que son diferentes, no conseguirán el sello de la distinción, y puede que sea por aquello del mensaje que no ha quedado claro, si todos somos iguales, hubiera sido mejor elegir otro, por ejemplo “Distíngase, vote diferente”, aunque sean iguales al resto.
El caso es que después de dos jornadas de “asamblea espontánea”, donde se dijo de todo pero nadie aludió al lugar privatizado, ni a la empresa que durante muchos años dispondrá del espacio mientras cobra, ni se sabe cuantas veces, el dineral que dicen que se llevó la inversión diferente, haciendo posible, y solo con dinero, (que es como las cosas se hacen) lo que tenia una calificación diferente, que no distinta.
Pues allí, en ese lugar destinado a ser la azotea-botellodromo, sitio emblemático en el que ya en su génesis le soñaban en Berlín que seria tomado por la juventud. Plaza para la mayor indignación, plaza privada, plaza para un nuevo movimiento inusual, fuera de toda manipulación, (para lo cual ha bastado las redes sociales), y súbitamente unir a todos los indignados a una “Fuenteovejuna” para ocupar las escalinatas para la foto del Washington Post.
Allí, arriba del mercado mas indignante, gente en cantidad compartiendo el espacio privatizado, mayores y pequeños, universitarios y profesores, trabajadores y desocupados, sindicalistas y autónomos, incluso en tanta gente se podía ver que de todas las tendencias, (se coreaba, misma mierda es).
En el mojón, que también puede llamarse hito, el hito no era el mojón, ni el mojón era cosa de ensuciar aquello, que por el momento, la propiedad mantenía en la limpieza. Cierto es que no aparecieron las hordas vandálicas, ni las grafiteras que tienen el centro lleno de garabatos multicolores, y era el orden natural de la educación lo imperaba en la placidez de la azotea de las sombras.
Es extraño, que tanta gente mantenga sin liderazgo una conducta casi insólita, ningún papel en el suelo, ninguna pintada en las paredes, ninguna colilla, ni tan siquiera rastros normales de las concentraciones juveniles de una noche. Por decir, ni tan siquiera un cristal roto se apreciaba en el suelo. Queda de manifiesto que no está la juventud ocupando el metropol, reivindicando un metro, lo que demandan es algo mas serio, se llama democracia real, y por todo lo escuchado, nada me parecía diferente, todo sigue siendo mas de lo mismo, pero al menos en la plaza de la Indignación, la acampada ha demostrado que lo mismo aquello puede ser convertido en un campamento de verano para lo cual solo le faltan varias piscinas portátiles, y poner en funcionamiento los aspersores, pero entre una cosa y otra, como que no me enterado bien del mensaje, ni me quedó claro que hay que votar para que esto cambie. ¿Acaso, no votar?. Pues si dicen que “Ni pesoe, ni pepe, que la misma mierda es”, lo mismo están dirigiendo el voto, en una encubierta manipulación, nada menos que a los pa., acaso por que son tan minoritarios que, en los “Perdigones” para no variar, se podía distinguir a unos cientos de los mismos.(Parece ser que no utilizaron las “redes sociales”)
En la plaza de la Indignación, me cuentan, que los indignados se podían contar por miles, al amanecer, bajo las mantas aun quedaban varios cientos. Todo igual.
Sevilla a 21 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez Estévez

martes, 17 de mayo de 2011

LA PUERTA DE CERES

Esto se está acabando

Hace ya algunas jornadas, que vengo pensando poner final a esto de escribir mas de lo mismo, pues pienso que, ya sin más remedio, solo queda esperar el dictamen que haga el tiempo, pues la cosa, pocas soluciones tiene.
Solo en lo que respecta al mercado, la plaza de toda la vida, al quedar jibarizarda en una reducción insoportable, y que ademas se ha travestido, dicen de modernidad, tal como aquellas galerías que aparecieron en los 70, pero con el disfraz de lo absurdo cubriendo sus vergüenzas, de tal suerte que ni por casualidad resulta ser un lugar emblemático, como el que se esperaba que fuera a semejanza de los que en las grandes ciudades aciertan a cuidar los suyos tanto como activo turístico, y por supuesto en sus valores etnograficos, arquitectónicos, culinarios, gastronómicos y comercial.
Seria prácticamente imposible en nuestro caso, lo de la Encarnación, que ahora que se está acabando, y a pesar de la nanotecnología al alcance, se dispusiera de ella para aprovechar la energía solar y que por su utilización alcanzara ese marchamo de sostenible, cuando menos para ahorrar la factura de electricidad a los placeros, pues al parecer lo de la capa de ozono, y el cambio climático, son otras sostenibilidades.
En el mismo nivel de posibilidades, es decir las nulas, estaría las distintas modificaciones que aquello mínimamente necesita para transformar el laberinto de formica en un lugar amable.
Cabe el ejemplo de subir el nivel del suelo, lo justo para que los mostradores no resulten tan excesivamente altos, (por las medidas que se debieron tomar, si no se explica, con sistema etilico en lugar de metrico), mejorar los desagües de pendientes imposibles, en inutil intento de ocultar cuantas rejillas fueran posibles. Cambiar el poroso suelo gris de un sucio granito por una solería antideslizante de mejor tonalidad. Distribuir mejor las puertas existentes, e incorporarle el automatismo, para evitar un considerable esfuerzo a cuantas personas tengan que abrir para pasar una pesada hoja, cuando, rozando lo inaudito, no se lo creerán, pero colocaron las cuatro juntas.
Mucho más improbable es que se reduzcan los revestimientos del bosque de columnas, 14X8 centímetros cada una, para paliar el error de convertirlas en obstáculos cuando deberían de haber sido integradas en los puestos y fuera del viario. Pero una mayor dificultad se encontraría en habilitar puntos de extracción de aire, y cuando menos una ventilación durante las muchas horas en las que la climatización, por aquello del ahorro, queda en impasse.
Algunas de estas partidas ni son tan difíciles, ni excesivamente costosas, solo hace falta querer hacerlas, y aquí nos encontramos con las mayores dificultades. Deben de ser los comerciantes quienes las exijan, pero a quien, otro dilema, al concesionario arrendador, al la Gerencia de urbanismo, a la Delegación de Consumo, acaso no advirtieron nada cuando lo diseñaron, cuando lo realizaron, cuando lo recepcionaron, cuando lo supervisaron, cuando entregaron las llaves, ¿y los placeros?, ¿Por qué lo aceptaron?. Preguntas, y mas preguntas, sin soluciones.
Ahora que esto se está acabando, pocas soluciones quedan. Conseguir que Ceres retorne a lo de la Encarnación, ya parece un premio de los grandes. Debo de dar las gracias a Jurgen Mayer, que como todos sabemos, el no diseñó el mercado amarillo, ni en su forma, ni en sus materiales, pero que ha aceptado de buen grado retirar la fuente exterior, e incluso el parterre, para que la diosa de la Encarnación quede allí instalada, acaso protegiendo a los placeros.
Puede que todo sea por esto de las elecciones que aun no se haya colocado la escultura en su sitio, cosa que también ha sorprendido a todo el equipo de arquitectos que han venido de Alemania para supervisar los últimos trabajos llevados a cabo, y según me comunicaron, para alegrarme el día, abrir una puerta nueva junto a la diosa no supone ningún problema, es mas pudieron comprobar que es de gran importancia para mejorar el flujo de clientes realizarla. La cosa es, que aunque se esté acabando esto, más parece que lo aceleran.
Sevilla a 12 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez Estévez

La monada

El primate

Me ha costado seguir el hilo,pues el gorila a sueldo que han puesto para hacer poco, (además de levantar al pobre indigente evitando que eche una cabezada a los pies micologicos de la escalinata), acaba, en un acto propio de los chuloputa, de destrozar el papel, ese que cada vez que desaparecía, volvía a colocar tras la columna de formica.
Parecía que se le llenaran los ojos de sangre con tanta saña empleada, pues acabó haciéndolo añicos para que nadie recuerde que era lo que se decía en el pliego escrito con letras del alfabeto romano, (igual que las ruinas de lo de la Encarnación), para que el mensaje pudiera evitar que aquellas por nada del mundo salgan del sótano y se acaben instalando en la cota cero.
El primate, es sabido que como no piensa no tiene ni la menor idea de lo que acontece, solo obedece con fijeza la orden de aquel quien el piensa que depende su sustento, y poco importa que en su costumbre, al asemejarse al pan paniscus, (que solo puede pensar en lo mismo), que junto con los efectos de la crisis le impida el raciocinio.
Acaso sea el domador de mono, que mala es el hambre, (y la interminable crisis), cuando tomando la relevancia de individuo dominante, obliga al pobre ser dominado,a tener que realizar estas acciones tan propias de mandril, como puede ser actuar por sorpresa, y por todos los medios evitando ser sorprendido.
En el cartel, un simple papel que estaba colocado alli para que todos lo pudieran mirar, no tenia puesto ningun nombre, ni era cosa de susto, ni alegre.
Tenia un texto serio que parecía una broma, y eso debió ser que en algún sitio molestara lo suficiente como para movilizar al elenco circense, payasos y fieras, domadores y cuadrumanos, mas, cuando hasta la prensa, con anterioridad lo había recogido como información, justo cuando todos los candidatos de las proximas municipales estaban informados, e incluso los mas importantes reconocían, cosa cierta, que evidentemente allí, donde el papel, lo que faltaba era una puerta, a ser posible automática.
Y miren por donde, en actuación propia del lomo plateado haciendo sonar el hueco retumbar de su estomago agradecido, y antes de tener que prometer, como al parecer habia dicho, que nunca mas volvería a pasar hambre,de lo que el viento se llevó (con lo malito que está el trabajo), accede gustosamente a quedar convertido con su complaciente monada, cosas del circo, en un animal.
Y cabe preguntarse, cual sería el daño que aquellos dos folios podían hacer a quienes hacen lo imposible, punto com., para que quedara hecho trizas.
Me ha costado seguir el hilo, pero a pesar de que estas cosas de lo de la Encarnación ya casi no me afectan, comprenderán que no es de buen gusto ponerse a la altura de un animal, ni mucho menos, a mi edad, tenerlas que tener tiesas para enfrentarte con un gorila.
Sevilla a 17 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez

domingo, 15 de mayo de 2011

Este es de 2002

Publicado e el Pais

OPINIÓN DEL LECTOR
La Encarnación
Francisco Rodríguez Estévez - Sevilla - 09/10/2002

Después de tantos años recopilando cuanta noticia relativa a la Encarnación, me cuesta trabajo entender todo lo que se ha venido desarrollando y publicando, y al igual que la delegada, también estoy confuso, pues cotejar lo que sé, lo que dicen, lo que se comenta, lo que veo, lo que leo y lo que quieren que crea, no es para menos. El que lo defiende lo entierra, el que lo entierra lo salva, el Mercado dotado es un sótano, el que miente dice que dice la verdad y que la avería es de la calle, las rampas no tienen aparcamiento, la energía solar se olvidó, la madrassa se ha perdido e Hispalis duerme, el arquitecto no se decide, los licenciados en Historia son cuestionados y al que pone la tela ni lo informan. Por fin, los desesperados placeros protestan, aunque algunos no tenga claro de por qué, pero es justificable, ¡están hartos!
Sevilla 6 de Octbre de 2002

Otro de 2004

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OPINIÓN DEL LECTOR
El Parasol de la Encarnación
Francisco Rodríguez Estévez. - Sevilla. - 16/06/2004
Parasol, que así se llama la propuesta ganadora del concurso de ideas para la plaza de la Encarnación en Sevilla, no es un edificio al uso, es una cubierta permanente, una sombra de por vida. Desde el principio su espectacularidad llamó la atención y era la favorita en las apuestas. Gustan por lo visto en esta ciudad las fantasías animadas, de ayer y hoy, porque en el fondo todos somos como niños, y como tales, los juguetes nuevos. Unos para disfrutarlos, otros para destrozarlos como jardines.
Digamos pues, que se ha dado un paso más hacia la modernidad, ni Leopoldo, ni Currito, Parasol será una cubierta que, aunque me sigan pareciendo enormes hongos, no se inspiraron en éstos, ni por su nombre en la sombrilla de playa, su creación viene de las higueras de San Pedro, a eso hay que llamarle imaginación.
Al mercado multidisciplinar (hay cada palabra), ese que de siempre se llamó plaza de abastos, al menos lo situaron en una "intermedia cota de rasante", para que a través de rampas y escalinatas pueda accederse a su cubierta que, de inmediato, queda convertida en zona multiuso, lugar de esparcimiento para la juventud, sala de conciertos de rock y otras actividades lúdicas (no se asegura que quede convertido el techo del mercado en botellódromo y lugar alternativo para la movida).
Ya lo imagino punto sindical de referencia para las distintas marchas de protesta. En el aspecto técnico no queda claro si la perforada cubierta, para mitigar los rayos solares, puede tener distinto comportamiento en caso de chaparrones, y actúe por el efecto árbol, en este caso higuera, mojando a los transeúntes después de haber escampado, ni tampoco si las perforaciones, en los días de viento, llenaran de fantasmagóricos sonidos el enclave.
Se sabe que no serán parasoles de cobre, como en un principio, pues se pasa al empleo del aluminio y otros metales, acaso cayeron en el recalentamiento y en la conductibilidad de los efectos de don Helios. El presupuesto recortado es de 33 millones de euros, el estimado 50, sin imponderables, ni paneles para recoger la energía solar.
De un tiempo a esta parte se tenía la impresión de que las arcas municipales andaban algo cortas, afortunadamente ésta ha resultado ser una falsa apreciación a tenor de la determinación tomada.
Nunca pensé que la Administración estuviera tan boyante y se optara por la cubierta cara, cuando de similares características pero más económica existía la propuesta Umbrage. Umbrage no es de diseño foráneo, ni tiene su creador currículo internacional, ni tan siquiera su nombre suena raro, Paco Cifuentes. Umbrage, que es sombra en inglés, umbráculo, sombraje, pérgola, no es sino un parasol, un parasol como cualquier otro, una cubierta económica bajo la que se encontraba un mercado, por supuesto emblemático, dejando mucho espacio libre, más de tres mil metros, incluso alguno con sol para el invierno, una torre-mirador, ésta sin ascensor panorámico, y hasta 50 aparcamientos; ni que decir tiene que todo ello, sobre la cubierta de la cripta museística de la Hispalis, que tendría entrada independiente. Total, 3 millones de euros. Dieciséis veces menos, el valor de la propuesta ganadora. Este era un proyecto para realizar en poco tiempo, fácil y asequible, pero poco fotogénico para la foto de grupo. Se ha optado por este espectacular diseño que esperamos que, para bien o para mal, sea el sol lo único que detenga y pare, parasol metropol. Bienvenido Para Sol. Bienvenido Metro. Bienvenido Mister Marshall.
Sevilla a 15 de Junio de 2004

sábado, 14 de mayo de 2011

OCHO AÑOS EN EL PAIS

ACABO DE ENCONTRAR ESTA CARTA EN LOS ARCHIVOS DE PERIODICO QUE LA PUBLICÓ, LO CUAL ME HA CAUSADO UNA GRAN ALEGRIA PUES PERDÍ TODOS LOS ARCHIVOS ANTERIORES AL 2006, Y AL MENOS ESTA SE HA RESCATADO, DESPUES DE OCHO AÑOS.

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OPINIÓN DEL LECTOR

El laberinto de La Encarnación
Francisco Rodríguez Estévez - Sevilla - 01/04/2003



Las primeras figuras del toreo político, no se anuncian en esta plaza, ni están ellos, según dicen, para esta corrida tan comprometida. Tal y como están las cosas a nadie se le escapa que, sólo la osadía tremendista, casi novilleril, de hacerse un hueco en la fiesta, por llamarlo de algún modo, lleva a quien, en la peor de las irresponsabilidades, tratan de entrar en estos carteles de pavor, sabiendo lo que hay, sustos incluidos, creyendo que pueden salir indemne de este coso.
Y es que a este laberinto de la plaza de la Encarnación, en lugar del Minotauro, se le ha alojado en sus entrañas un terrorífico encierro de Palha, dispuesto a llevar a los hules al guapo que se le ponga por delante. La opinión pública empieza a interesarse por el asunto y la afición hasta sospecha malévolamente por que se le metió mano, si la Ley establece unas excavaciones que, por lo que se desprende, se intentaba soslayar con pretextos inexplicables. El hecho de que empezaran unas obras, 16 de abril, y se contratara un equipo de arqueólogos dos meses después, 15 de junio; que se coloque la primera piedra, 26 de julio, y que hasta el 16 de agosto no se nombre arquitecto; que en septiembre se paralicen las excavaciones por razones de método y no se reanuden hasta finales de febrero, que 20 días después aparezcan vestigios valiosísimos, como pueden ser cinco casas almohades del siglo XII y XIII, donde se dijo que no había nada, y que el arquitecto, sin tener una valoración final, que corresponde a la Conserjería de Cultura, tenga realizado los planos del mercado semienterrado, ya de por sí son astifinas arboladuras para tener en cuenta y si no se encuentra la salida al menos deberían de empezar la faena, o los mantazos, sus lidiadores, cerca de la puerta de enfermería.

Sevilla a 1 de Abril de 2003

Carta publicada (14 de Mayo de 2011)

Como el laberinto del mercado amarillo (lo de la Encarnacion) no tiene ni pies ni cabeza, y visto que como no queda mas remedio que acostumbrarnos a el, y como para colmo el concesionario parece mas empeñado en el fracaso comercial que a su exito, pues, hay tantas pequeñas cosas que ya deberian de haber sido rectificadas para mejorar el desatino obrado, y hacer del llamado inhospito mercado, un sitio ligeramente mas amable, que aun me pregunto que es lo que pasa.
El caso es que ahora estoy demandando en todo lugar que puedo hacerme escuchar, el retorno a la Encarnacion de la escultura de Vasallo, la diosa Ceres que estaba en al antiguo mercado, cuando menos para que si se instala alli la escultura, que es de gran tamaño, que esta con sus medidas de seguridad, podria evitar que el escondrijo que queda en la escalera de poniente,(la de la Venera)no acabe convertido en letrina del Sabado noche, para lo cual esta medida tendria que estar acompañada de una nueva puerta al mercado.
Es imprescindible, cuando menos, para evitar que la travesia central deje de ser el dominio de la soledad que actualmente reina en ese mal planificado mercado, al que en cuatro meses le lleva costado dos bajas, por algo tan sencillo como mejorar el recorrido del publico, y crean con certeza que esa es de las pocas soluciones que pueden ofrecerse, naturamente sin demolerlo, cual es abrirle al mercado una nueva puerta, esta se diria que es casi imprescindible.
Ni que decir tienen que alli, en ese lugar en el que a diario muchas personas esperan escontrar la entrada inexistente, he colocado como aviso y llamada de atencion, un cartel demandando que se abra una nueva puerta, cartel que cada día por superior orden retiran los operarios, ni que decir tiene que cada mañana lo vuelvo a reponer con el fin de que quede patente la necesidad de esta puerta a tenor de la sonrisa de cuantos se llevan el chasco, al comprobar que por donde quieren entrar no existe puerta alguna, y tienen que dar el rodeo para entrar, y de muchos de aquellos que tras su fracaso intento de entrar al mercado, al menos lo fotografian para el recuerdo. Espero del periodismo local que hagan algun articulo al respecto, no sin antes comprobar este argumento, y de paso pongan una foto del cartel, para que con su difusion acaso pueda llevar a razones a la concesionaria, si es que de verdad esta quiere mejorar la situacion en ese lugar de lamentable diseño.
Un saludo de francisco rodriguez

viernes, 13 de mayo de 2011

En la plaza

En campaña

Con subalternos de platas, y monosabio rojo, la cuadrilla realiza el paseo inaugural. Una entrada por una salida, sin que acertara, montera en mano de claveles, como un monte, a pasar por la barrera del burladero del desolladero.
El primer espada ha llegado a la plaza.
Ha sido el candidato Espadas, el primer ídem que ha llegado a la plaza, la de la Encarnación, cierto es que por la brevedad de la faena, al resultar cogido por “Cronos”, difícil tenía conseguir algunos trofeos.
Salió rápidamente por el callejón de servicios, se diría que escabulléndose, por aquello de las urgencias que le apremiaban, seguro, que de haber estado mas placeado posiblemente las urgencias no hubieran existidos.
No se advierten cambios en la cuadrilla de paseo, como los capotes, cuando a Espadas le secundan, (tal como si no hubiera pasado el tiempo) los mismos colaboradores para componer la misma comitiva de siempre.
Es tiempo de campaña, y de igual manera que en anterior, en los nuevos tiempos, también acompañan al novel, el bueno de Bernardo con su inmemorial saber, la legendaria madrileña, con su amparo incondicional, y la nunca valorada compañía de “zapatero”, relleno especial, e histórico de los tiempos del tranvía.
Una vuelta a la plaza, a la media plaza, pues si no pasaron por el burladero del desolladero, también evitaron el de la capilla.
Hoy ha venido el candidato Juan Espadas a lo de la Encarnación, ha sido una visita relámpago, tanto que casi se marcha y ni tan siquiera alcanzo a verlo, por mas que estuve alerta para hacerle comprobar in situ todas esas cosas de lo de la Encarnación que se sobra el ya sabe.
Cuando se despedía del personal pude llegar, para decirle que podía haber sido el primero, pero ni eso, de haber pasado por donde me encuentro y que hasta el momento ningún político de los muchos que han pisado el mercado amarillo, ninguno ha tenido la voluntad de llegar hasta ese lugar donde les espero, por mas que el encuentro solo se trate de un detalle.
Esta vez, por aquello de la urgencia, tampoco le he pedido al candidato el programa electoral, ya que solo quería invitarle a la reflexión, (puesto que es persona técnica en gestión, especializada en medio ambiente) en este desacertado lugar, tan solo por si llegado el momento el pudiera llevar a cabo algunas rectificaciones.
Se marchaba con prisas, pero mira por donde, después de saludar a Bernardo Bueno, irrumpió en un quite artístico con su inigualable estilo, (que se diría talante) la personalidad de Amparo Rubiales, para que nada menos que invitando a la numero dos de la lista del partido socialista obrero español, la periodista Mercedes de Pablos, tuvieron a bien acompañarme hasta el lugar donde demando sea instalada la Diosa Ceres, para que de paso que proteja a los placeros, pueda abrir una puerta al objeto de que cambie para mejor, el flujo de afluencia y evacuación, y facilite el transito y la circulación de los clientes. Ni que decir tiene que no en vano son dos mujeres de gran inteligencia, pues al instante ambas se dieron cuenta de que allí, independientemente de la llegada de la escultura de Vasallo, lo inminente es abrir una nueva puerta.
Me quedo con esta impresión, y el compromiso de ambas, en un asunto de fácil solución y mínimo costo, pues cuando celebremos el retorno de Ceres, con seguridad todos estaremos allí, a ser posible sin urgencias para la ocasión y nos encontraremos en la puerta, tal como si fuera en feria.
Sevilla 13 de Mayo de 2011
Virgen de Fátima
Francisco Rodríguez Estévez

En la plaza

En campaña

Con subalternos de platas, y monosabio rojo, la cuadrilla realiza el paseo inaugural. Una entrada por una salida, sin que acertara, montera en mano de claveles, como un monte, a pasar por la barrera del burladero del desolladero.
El primer espada ha llegado a la plaza.
Ha sido el candidato Espadas, el primer ídem que ha llegado a la plaza, la de la Encarnación, cierto es que por la brevedad de la faena, al resultar cogido por “Cronos”, difícil tenía conseguir algunos trofeos.
Salió rápidamente por el callejón de servicios, se diría que escabulléndose, por aquello de las urgencias que le apremiaban, seguro, que de haber estado mas placeado posiblemente las urgencias no hubieran existidos.
No se advierten cambios en la cuadrilla de paseo, como los capotes, cuando a Espadas le secundan, (tal como si no hubiera pasado el tiempo) los mismos colaboradores para componer la misma comitiva de siempre.
Es tiempo de campaña, y de igual manera que en anterior, en los nuevos tiempos, también acompañan al novel, el bueno de Bernardo con su inmemorial saber, la legendaria madrileña, con su amparo incondicional, y la nunca valorada compañía de “zapatero”, relleno especial, e histórico de los tiempos del tranvía.
Una vuelta a la plaza, a la media plaza, pues si no pasaron por el burladero del desolladero, también evitaron el de la capilla.
Hoy ha venido el candidato Juan Espadas a lo de la Encarnación, ha sido una visita relámpago, tanto que casi se marcha y ni tan siquiera alcanzo a verlo, por mas que estuve alerta para hacerle comprobar in situ todas esas cosas de lo de la Encarnación que se sobra el ya sabe.
Cuando se despedía del personal pude llegar, para decirle que podía haber sido el primero, pero ni eso, de haber pasado por donde me encuentro y que hasta el momento ningún político de los muchos que han pisado el mercado amarillo, ninguno ha tenido la voluntad de llegar hasta ese lugar donde les espero, por mas que el encuentro solo se trate de un detalle.
Esta vez, por aquello de la urgencia, tampoco le he pedido al candidato el programa electoral, ya que solo quería invitarle a la reflexión, (puesto que es persona técnica en gestión, especializada en medio ambiente) en este desacertado lugar, tan solo por si llegado el momento el pudiera llevar a cabo algunas rectificaciones.
Se marchaba con prisas, pero mira por donde, después de saludar a Bernardo Bueno, irrumpió en un quite artístico con su inigualable estilo, (que se diría talante) la personalidad de Amparo Rubiales, para que nada menos que invitando a la numero dos de la lista del partido socialista obrero español, la periodista Mercedes de Pablos, tuvieron a bien acompañarme hasta el lugar donde demando sea instalada la Diosa Ceres, para que de paso que proteja a los placeros, pueda abrir una puerta al objeto de que cambie para mejor, el flujo de afluencia y evacuación, y facilite el transito y la circulación de los clientes. Ni que decir tiene que no en vano son dos mujeres de gran inteligencia, pues al instante ambas se dieron cuenta de que allí, independientemente de la llegada de la escultura de Vasallo, lo inminente es abrir una nueva puerta.
Me quedo con esta impresión, y el compromiso de ambas, en un asunto de fácil solución y mínimo costo, pues cuando celebremos el retorno de Ceres, con seguridad todos estaremos allí, a ser posible sin urgencias para la ocasión y nos encontraremos en la puerta, tal como si fuera en feria.
Sevilla 13 de Mayo de 2011
Virgen de Fátima
Francisco Rodríguez Estévez

miércoles, 11 de mayo de 2011

En el recuerdo

La sinergia

Cuando aquel concejal, que de siempre me parecía personal seria, empezó divagar con lo de la Encarnación, me temí que sucediera lo que tenemos, lo peor. Cuando le escuché decir que si había que cambiar normas y reglamentos, que se cambiarían, dejo de parecerme seria.
El tiempo, que dicen que quita y da la razón, en este caso casi no cuenta. Es el propio diseño del llamado mercado emblemático, eso que han realizado en lo de la Encarnación, y que ya me gustaría ver la factura del equipamiento, para encontrar la causa de la desproporcionada desviación que sufrió esta partida.
Aquel que dejo de parecerme persona seria, y que ahora traigo en el recuerdo, dejó de interesarme cuando en lugar de razonamientos aplicados al estudio de viabilidad, nunca realizado, en lo de la Encarnación tuvo la ocurrencia, cuando tenía las maletas preparadas, de bautizar aquello como la sinergia comercial del deteriorado sector abandonado por los años de ineficacia municipal, y ya ven el resultado de su vaticinio.
Es evidente que lo esotérico es algo tan íntimo que la divulgación tiene malas consecuencias. Cierto es que muchas tribus tienen a las setas como un vehiculo para llegar al mas allá, una droga alucinógena que deja sin voluntad, y que utilizada por el curandero se alcanza a ver cosas nunca anteriormente vista, como lo de la Encarnación, o ¿acaso ha visto alguien una cosa igual?
Una sinergia de tal calado y modernidad que colocaron las puertas juntas, los mostradores altos, las cámaras sin herrajes, las luces lastimosamente débiles, los desagües sin pendientes, la ventilación inexistente, el suelo poroso, el viario asimétrico, la sostenibilidad en el olvido, y además los cristales perimetrales, al ser reflectantes, actúan como espejos impidiendo que los puestos del mercado puedan ser vistos desde el exterior.
A todo esto de difícil respuesta, económica naturalmente, se podrían unir esas otras zarandajas, que podían ser fácilmente reparadas, para el mejoramiento integral del mercado, pero que incomprensiblemente no se llevan a cabo, y para mi que lo de la sinergia va a ser otra cosa.
Lastima que ya no queden personas serias, como era aquel olvidado concejal antes de que empezara a divagar por esta ciudad de la gracia, a la que llamaron de las personas,y le rieron la gracia. Persona de esas que ya apenas quedan, persona sin rodeos, ni verborreas interminables para escurrir el bulto de la responsabilidad, personas en las que se pueda confiar tan solo con oírla en su compromiso, pues su palabra si que puede considerarse una sinergia, y lo demas es tonteria.
Sevilla 11 de Mayo de 2011
Francisco Rodriguez

martes, 10 de mayo de 2011

CARDINAL 2400

Los millares

No se trata, como pueden comprobar, que los millares en este caso sea una colección de las famosas arpilleras del autodidacta canario aquel que hacia creaciones en blanco y negro partiendo, cosiendo, y pegando telas de sacos, para que estas llegaran a ser, en criterio de expertos, verdaderas obras de arte.
Tampoco corresponde la referencia que se hace, al poblado tartésico, ese que según los que saben, certifican, a falta de propaganda de la epoca del cobre, que la inauguración del conjunto tuvo lugar por el 2700 antes de Cristo.
Ni que decir tienen que estos millares nada tienen que ver con un lote de “espantalobos”, pues si acaso, el único “lobo” del asunto hace para cuatro años que le buscaron la salida, y eso que salió en la foto cuando el premio.
Pero la verdad del caso, es que por ningún lado pueden verse a esa multitud que dicen visita cada día a lo de la Encarnación. Trato en vano de calcular donde se formaran como mínimo esas dos docenas de grupos, que son veinticuatro, (cuatro cada hora), con un centenar de personas cada uno, para realizar de forma multitudinaria la visita y el recorrido espaciado e individual de la sinuosa pasarela realizada en la cubierta del “metropol”, deleitándose contemplando la panorámica socializada de una visión inédita de la ciudad, cosa que hasta la fecha solo podían embelezarse los privilegiados vecinos de la Encarnación desde sus azoteas.
Pero los millares, que por suerte no son de millones, pues las cuentas tendrán otras ocasiones, eran estos otros en los que detenía la atención, bastaba pensar la idoneidad para colocar los millares de candados, cientos de miles de candados enganchados en ese camino tortuoso de ida y vuelta como la vida, con sus ascensiones y sus declives, como las tres cosas, la salud, el dinero, y el amor, ese que se jura eternamente,(inconcientemente) y que sin encontrar un futuro de estabilidad, aparte de la pasional, se cierra con un simbólico candado, tal que el acto pareciera que guarda un cinturón de castidad, una exclusividad de carnes morenas para las orejitas.
La Encarnación, así quedaría de nuevo convertida en símbolo de la carne, de lo carnal, de lo amatorio, especialmente con el revestimiento de candados en todo el recorrido de esta nueva vía Láctea, pero sin tener que arrojar el hierro de sus llaves para contaminar al Guadalquivir, y en nueva moda, pueden colgar los enamorados estas guardianas de las virguerías amatorias, con cadenas al cuello, al menos mientras dure, y si alguna vez se rompe tanto amor, vete a saber por que pajas, lo mismo se sube al “nimbo”, y se retira la pieza de la baranda, hasta que se encuentre otra parte de la pareja, para formar una nueva con la que compartir la llave, entre otras cosas, como la bicicleta, y quien sabe si estas tan de moda hace furor aparcarlas justo en las barandas del inmenso botellodromo,y la estación intermodal de movilidad que tanto quedó en entredicho, lo mismo es eso, y allí hay si que hay baranda para millares.
Sevilla a 10 de Mayo de 2011
Francisco Rodriguez

lunes, 9 de mayo de 2011

Otro abandono (Van dos)

El indigente

Era de esperar que cualquier día de estos ocurriera, y parece que ha tardado demasiado en llegar, justo el mismo día en que se encuentra un final anunciado, aparece la indigencia en el “metropol”.
Era un hombre de mediana edad, por su apariencia indefinida, y envejecida por el nomadismo practicado a la interperie, pero lo mismo podría ser mas joven de lo que aparentaba.
Solo buscaba el descanso y acertó de pleno para instalarse en la pequeña lagrima, ese capricho en la que el diseño de Jurgen Mayer, hace posible que se convierta en un santuario para Ceres, siendo lugar en el que tenia destino una "fuente bulto", y posteriormente se pensó en un parterre de magnolio, que afortunadamente no llegó a plantarse pues hubiera estado condenado a secarse envenenado con los detergentes que limpian los contenedores de basura.
Mientra llega la Diosa hasta ese santuario, el indigente puso lecho de granito en el semicírculo del ábside al Oriente de la Fachada de Poniente, como parte contratante de la primera parte, y definitivamente, derrumbado y vencido cuando llegaron los primeros rayos de Sol, cayó abatido por el sueño atrasado de las noches al relente.
Poco equipaje, un sombrero y una bolsa de plástico que deja advertir algo de ropa de abrigo, una varita flexible, como de adelfa, y poco mas.
Solo lleva tres horas en aquel lugar durmiendo placidamente, y el Sol le alcanzaba pero sin llegarle a la cara, para calentarle los tuetanos de los huesos fríos de madrugadas y sin el calcio que el cortado con leche que no toma tan bien le vendría.
Tengo la impresión que su presencia no la causa buena, motivo por el cual no tardará mucho en ser despertado, con una invitación a abandonar aquel lugar cuando de invitarlo hubiera sido mejor a algo de comer, a ser posible caliente.
Podía haberse quedado en su eventual domicilio, con pleno dominio alcanzado en su espacio ocupado de vía publica, y nadie tendría fuerza legal de expulsarle de la calle, pero por los miedos, o por la falta de interés en permanecer por mas tiempo en ese lugar de acogida, decidió marcharse con una leve protesta de contrariedad a la persona que doblándole el peso y la envergadura, interrumpió su descanso.
De haber habido una puerta nada hubiera sucedido, y como con seguridad este episodio se repetirá a partir de ahora casi a diario, pues es el lugar idóneo para afincarse todo aquel que no tiene, lo cual, para evitar esa deplorable imagen que la indigencia nos causa, cabe pensar que una vez que Ceres llegue y colmate con su majestuosa divinidad el Tholos de Mamaria que se la ha dispuesto en el mismísimo Ombligo del Mundo, que como todos sabéis es la Encarnación de mis canas, (antes de mis carnes) lo ideal es que alli se abra una puerta, que si además de invitar al publico a pasar,y contemplar la "divinidad del mercado" sin duda evitará que se vayan los placeros, abandonando el primero, claudicando el segundo, ante un imposible futuro, evitando que alguno mas pase a formar parte del pasado,como las ruinas del nivel uno, y lo mismo acaben como el indigente, despertando del sueño.
Sevilla a 9 de Mayo de 2011
Francisco Rodriguez Estevez

domingo, 8 de mayo de 2011

Travesia Central

Efectivamente

Mucha gente, pero no tantas. Efectivamente cuando la información que aparece en los medios no es cotejada, y esta se limita al comunicado “gooebelsiano” que normalmente se hace en estos casos, la desinformación es evidente.
Desde mi privilegiado observatorio tengo permanentemente la oportunidad de ver cuantas personas circundan por lo de las setas, y resulta que, o el que las cuentas no sabe, o las bullas me cogieron mirando para otro lado.
Estos numeros serian de poca importancia, ya que los importantes estan por saberse, y la relevancia del numero de visitantes solo puede tener la que se le quiera dar, pero cuanto mejor no sería, que se fuera cuando menos riguroso en el recuento, y no hacer una estimación cosa que siempre puede ser cuestionada por la apreciación.
De todas maneras poco afecta estas multitudinarias visitas preconizadas ex profeso para las ruinas de la Encarnación, cuando en la plaza de abastos la ausencia se hace patente y la soledad hace presagiar que nunca tendrá el esplendor de las que se muestran en los sótanos. Cierto es que la visita puede apreciarse un circuito excelentemente diseñado para exponer los mosaicos, incluso en otro sitio de donde fueron encontrados; que la iluminación esta perfectamente estudiada por expertos; y las puertas situadas estratégicamente, junto con la utilización de los distintos ascensores facilitan a los visitantes la entrada al recinto.
Nada tiene que ver con lo actuado en la plaza de abastos, que ni por asomo tiene rango de “emblemático lugar”. El viario realizado aleatoriamente, sin simetria ni ordenacion, se diría caprichoso, o a lo que salga. Sin estudio previo para optimizar comercialmente la aplicación del recorrido, con una podredumbre de luz, que choca con la que del exterior penetra de forma natural tras lo cristales que actúan como espejos, de tal suerte que el interior se hace invisible, con un descomunal revestimiento del bosque de columnas que incomprensiblemente no fueron integradas en los puestos para que las calle se mostraran diáfanas, y efectivamente, tal como aparece el cartel reivindicativo que elaboro a diario para que pueda ser leído, no por elevado numero de visitantes del comunicado, si no por las decenas que a diario buscan una puerta natural donde no existe. Efectivamente, parece ser que si la Diosa Ceres retorna a la Encarnación, las columnatas de formica se reducen, se potencia la luz artificial en el viario ya que su modificación resultaría costosa, pero a la larga muy barata, es evidente, que la puerta en la travesía central es algo que no se tiene mas remedio que abrir, cuando menos para que la mitad de los visitantes de “metropol” nivel uno,(ruinas) tres,(azotea) cuatro, (restaurant) y cinco, (vista panorámica), puedan acceder al nivel dos(plaza de abastos) a nada que bajen la escalera de la Venera.
Sevilla a 8 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez Estévez

martes, 3 de mayo de 2011

Tres mil cartas

Repaso

Ahora que lo de la Encarnación se nos hizo irreversible, cuando de nada puede servir lo que se pueda opinar al respecto, (me gusta, no me gusta) apenas me aparecen ideas para seguir escribiendo sobre esta increíble historia, de la que el futuro tienen derecho a saber.
En esta situación, donde los placeros fueron reubicados en el llamado mercado emblemático, siendo este un lugar hostil por las deficiencias que dividen a los comerciantes, creándoles desigualdades, por cuando existen demasiada diferencia segun la locacion de los puestos, y por aquello de no haber tenido en cuenta en el diseño de estos a los vendedores, y tambien por no realizar previamente un estudio del recorrido comercial del espacio, como método indispensable para que no queden espacios llamados “muertos”, es decir, sin transito de los posibles compradores.
Con seguridad con estas simples medidas todo hubiera sido más comercial, y si las puertas hubieran sido colocadas en lugares estratégicos con las que se facilitarían tanto la circulación interior, como una mejor orientación dentro del laberinto que aquello supone.
Es evidente que por mas que la modernidad no aparezca en semejante estructura y la sostenibilidad solo es algo inexistente, lo del metro y el metro centro son cosas que ya no tienen comentarios, por lo que aparte de pedir el retorno de la Diosa Ceres, para su
colocación en la fachada de poniente, parece mas que natural poder exigir una puerta para la travesía central, pues parece que es lo poco que puede lograrse, para que aquello cambie su negatividad comercial y pueda encontrar un equilibrio, ahora inexistente, entre todos los placeros.
Una pequeña medida, cuando se tendrían que tomar mayores decisiones y reformas, si es verdad que se quiere convertir aquello en un lugar de primera magnitud comercial, y no en lo que lleva camino de no cambiar los conceptos, las estrategias y la insolidaridad
Mientras tanto, solo puedo repasar las muchísimas cartas que fueron escritas a lo largo de los once últimos años, lo que hace que su recuerdo me lleve a confirmar que nunca se tuvieron en cuenta cundo de haberse hecho cuantas cosas habrían cambiado, y con toda seguridad a mejor, pues aunque cualquier cosa era mejor que el solar de la vergüenza que allí estaba, no cualquier cosa podía ser el mercado de la Encarnación, y ya ven.
Sevilla a 3 de Mayo de 2011
Francisco Rodríguez Estévez