domingo, 30 de noviembre de 2008

Bronce en las plazas

En la madera

En medio de la plaza, salvados los veladores, sin velas y sin madera, como temiendo que por el recurso se la fueran a retirar, lo de la Encarnación se explica en el Salvador.
Enfrente, al final, cerrando el conjunto, la mascara del sortilegio de la suerte.
Bajando por entrecarceles, se llega hasta el Ayuntamiento. En la puerta, como siempre, lo vi pensando. En su metalica mente no deja de darle vueltas a lo que acierta a ver. Siguiendo la línea de su vista, aparente e imaginaria, esta conduce a unos bancos vacíos, (sin comentario), revestidos de una madera desvencijada por el tiempo, escaso tiempo, pues ya era sabido que la madera nunca es metalica, salvo las que se anunciaron para la Encarnación.
El aspecto que ofrecen, bancos y madera, se diría que afean aun mas el transformismo ejercido, si es que se tiene memoria, de las de acordarse, en lugar de bronce fundido, como para recordar.
El sortilegio de la suerte, no se quedará permanentemente en la plaza. El pensador, tampoco, en el andén inexistente.
Otra suerte, y otro anden de un inexistente metro será para la de la Encarnación que se queda sin estación posible, con el fin que en el futuro puedan acceder al centro, llamado peatonal, a todas las personas que sueñan, tan solo por estar dormidas.
Esa plaza cada día más lejos, por razones técnicas y obvias, de un metro- centro, al que llaman tranvía. Esa plaza donde se eterniza una llamada vanguardia, para colmatar los de deseos de mimo ofrecido a los damnificados de las provisionales medidas tomadas por el franquismo, para que sea historia olvidada, después de 35 años, y erigir en su lugar otro recuerdo histórico.
Cogida de lleno por la crisis del ladrillo la constructora, se vuelven a abrir heridas viejas, a la espera de lo que la mano visible no escatime en maderas y pegamentos, como queriendo olvidar que no solo las escombreras se llenaron de pasado con las invisibles.
Desde el andén inexistente, donde el pensador clava su mirada en el estado en que se encuentran actualmente los bancos, de madera, ¿Alguien pensará, en lo de la Encarnación?
Frente a la famosa escultura que, no por olvido, sin madera pende en el Salvador, la mascara del sortilegio de la suerte, que tanto sabe de bancos y de maderas, nos recuerda cuanta fue que se olvidaran de la seguridad y de las fotovoltaicas.
Sevilla a 30 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

De feria, de prensa

La portada



Si acaso como anécdota, aunque repetida, con lo cual apenas tiene la poquita gracia que le quedaba, que se nos vuelva a presentar lo de los volantes, como los platillos, y encima que se diga que están inspirados en lo de la inacabada Encarnación, sin esperar a ver como se termina aquello, para la portada de Feria. Malo tiene que estar el arte. Pero no era eso.

La prensa. Casi toda la prensa, esta sacando en sus portadas la ruina, pero no la de la Hispalis que se encontraba donde estaba, en la Encarnación, si no la rescatada Roma que se puede contemplar en estos días.

Tambien aparece aquella que tiene la destructora, no solo de empleo, si no del Imperio a nuestros días, Quita tu, que me pongo yo.

Aviados estaremos si antes de fin de año, festividad de San Silvestre, para cuando tenia que estar pegado todo lo que tenia que pegarse en las laminas que llegaron por San Alejo, y se suponía en primera instancia que para San Zacarías, y en segunda por San Bonifacio, del pasado año, cuando la ocurrencia tenia que estar en marcha, y resulta que, como es probable, dice la prensa, no toda la prensa, que la ruina será de portada.

Bien hay que decir, como la prensa recoge, toda la prensa, que a menos que aparezca la mano invisible del mercado, que de siempre se creyó negra hasta que Barak tendió la suyas después del aclarado, y la cosa necesite la mano visible, nadie dudará en ofrecerla, y cogerla. Que la mano derecha, nunca sepa lo que hace con la izquierda.

Cosa que le resulta totalmente imposible, como ha podido saberse recientemente, a las almejas, según el laborioso estudio realizado sobre la proyección estructural del bivalvo en los lanzamientos acuosos, Via ema Cesar, e maná, Marco Aurelio, y canuté. Morituribus te salutam.

Salve destructora, diosa del Averno, para que el oro de Moscu nos venga encalado.

Sevilla a 25 de Noviembre de 2008

FRE




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viernes, 28 de noviembre de 2008

Por el Oeste

El cartel

Cabe la posibilidad de que el cartel de los toros, en sus últimas ediciones, tuviera la virtud de un dudoso gusto, al que llaman provocación de la atención. Lo cual hace evidente que esas provocaciones por aquí no alcanzan más que un comentario de barra a la afición y apenas pasa inadvertida para los demás.
Es una pena el costo de esos esfuerzos creativos, que no llegan a cuajar a pesar del desembolso. Parece ser que es cosa de chirigotas, pues no existe en esta ciudad que nos enamora esas voces que los popularicen, así quedarían recordados durante años, tal como el que magistralmente realizara Rafael Alberti, para los carnavales gaditanos. “Pero, Rafael de mi arma, que coño es eso”.
Sigue siendo la línea, llamada vanguardia, la elegida por la oficialidad, tal como hacia el propietario del cabaret parisino, que le encargaba vanguardias, cuando nadie daba un duro por ellas, para cobrar el ajenjo al noble tullido, genio tras su muerte.
El cartel de fiestas, ha sido creado por una artista de fuera, acaso sea un gesto integrador para dar importancia a aquello que no debería de tenerla, que sea una mujer, y que sea extranjera, cuando lo que interesa es difundir al mundo, con el escaparate del anuncio, que Sevilla está en fiestas.
Viéndolo, da que pensar que se haya querido resaltar la belleza de la mujer sevillana, claro está que en plan moderno, pero sin pircing en la nariz, ni tatuaje de colorines.
Poca significación puede tener estas omisiones, dentro de tanta modernidad, cuando aquello no deja de ser un mero anuncio realizado en un soporte efímero del que, aparte de lo anecdótico, pronto caerá en el olvido, con la excepción del currículo de la autora.
Lo peor es que a esta amante para los soñadores, madre, para sus hijos. Mujer, cantada en romántico bolero, Sevilla, en definitiva para todos, tenga que lucir, por narices, el pircing que le colocaron en la Encarnación, mostrar el tatuaje desangelado que le hicieron en la Alameda, y para desfigurar toda la belleza que conserva a sus años, esta bella y vieja dama, aparte de cepillarle el frondoso jardin, ni les cuento lo que quieren meterle por la puerta de entrada al “oeste”.
Sevilla a 27 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

En las Canarias

Folía de la Encarnación

No piensen que se trata de un nuevo atraso en las obras, aunque por el ritmo, más de milonga que de folía, así lo parezca. La folía se trata de un cante, un ritmo propio de las Islas Canarias, que se acompaña con el timple, bandurria, guitarra y contrabajo.
Esto lo se por que a través de un concurso, algo así como un “Se llama copla” que emite la televisión canaria, que explica y difunde su folklore. El concurso se llama “parrandiando” aunque lo lógico seria parrandeando, que es lo que hacen las parrandas, si mal por aquí los parrandas suelen hacer cosas muy distintas.
El esquema musical es la competición de tres agrupaciones que interpretan cuatro piezas, primero la famosa isa, de los crucigramas, luego, la folía, se dice que es el sentir profundo, le sigue la malagueña, que viene a ser una malagueña pero a cámara lenta, y por último el tema libre. Tal como una replica en su formato audiovisual, pero sin teatro y rodeado de publico, de la estructura del concurso de coros, en el carnaval gaditano, primero la presentación, los cuples, los tangos, y finalmente el popurrí, pero el jurado no falla, como en el concurso de lo de la Encarnación, allí aciertan de pleno, pues son los mismos participantes los que puntúan las actuaciones.
Cada jueves me siento enganchado por esta música, especialmente por la folía, que desconocía totalmente, y aunque pareciera repetitiva, pues el verso lo cantan del derecho y del revés excelentes voces, llama poderosamente la atención lo que dicen sus letras, al punto de que ni me podía imaginar que la Encarnación tuviera una canción dedicada. Esta folía de la Encarnación, estuvo interpretada por la parranda, “Vengavino” de Tenerife, siendo coreada por el numeroso publico presente que asiste a los estudios de grabación, y cuyo texto dice así: Encarnación que te pierdo, por la falta de razón, ¡ay, amor!, si pudiera salvarte mi corazon. ¡Ay, amor! ¡Ay, amor!, todo el mundo está en tu contra, y yo solo a tu favor.
Sevilla a 27 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

martes, 25 de noviembre de 2008

Carta a los vientos

Herreraenlaonda
Mí admirado D. Carlos:
Como imagino, no le será ajeno todo lo que viene sucediendo en esta ciudad de Sevilla, que tan bien conoce. Es cierto que de vez en cuando, especialmente desde la iniciativa privada, nos regalan admirables lugares tal como Abades-Betis, desde donde tuvo a bien hacer su programa radiofónico y que por su difusión pasó a ser como una invitación para su visita a todos sus oyentes.
Desgraciadamente sucede que, desde lo publico, otros edificaciones y lugares sufren, cuando no la ocurrencia llamada de vanguardia, (Alameda, Encarnación, Prado), o lo peor, padecer el denigrante abandono, que la responsabilidad tan bien ejerce.
Tal es el caso de la Fábrica de vidrios de la Trinidad, un bello edificio que seguramente conocerá, y que fue la primera cooperativa de Andalucía, con un historial a la altura de Murano, o la Granja.
El centenario complejo industrial se encuentra cerrado desde hace ocho años, sufriendo el vandalismo y el expolio, deteriorándose en el abandono oficial, a pesar de tener la protección de bien cultural (PIC), y según la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía, tiene valores que se le niegan, recogidos en el apartado de Patrimonio Industrial.
Al poco de su cierre se creó la Plataforma para salvar de la piqueta este edificio singular. Todo parece inútil. Ni se imagina el esfuerzo que este grupo viene realizando a tal fin, pero que no encuentra el respaldo de la sociedad, y menos el de la responsabilidad publica, hostil y como ajena en el asunto, para salvar un magnifico edificio y conservarlo en su integridad.
De poco han servido la recogida de firmas y los escritos, acaso creen que por insuficientes no merezcamos ser atendidos. La indolencia, tal vez por que el mensaje no llega al gran publico, no valora el esfuerzo que se lleva realizado con cuantas iniciativas hemos tomado, para concienciar a la opinión publica.
Tras la ultima reunión, que acabamos de celebrar, se me ha ocurrido, sin pensar en los detalles, pedirle que seria genial que algún día su programa pudiera emitirse a las puertas de este edificio cerrado, expoliado y ruinoso, tal vez con una unidad móvil, pensando que con la credibilidad de su voz, la ciudadanía respondería, o cuando menos a la responsabilidad. Así, el Palacio Pumarejos, el huerto del Rey Moro, la fabrica de sombreros Roche, las Reales Atarazanas, El jardin arrancado del Prado, la Alameda y la Torre Pelli, junto con lo de las setas, serian marcos incomparables.
Reciba con mi reconocimiento un afectuoso saludo
Sevilla a 18 de Noviembre de 2008-
Francisco Rodríguez Estévez

La voz autorizada, (mira quien habla)

La entrevista

Basta leer lo que la autorizada voz declara ante quien lo escribe, para cavilar si la cosa es como es, o lo que se lee es de otra cosa. Pues una cosa es la milonga de la Alameda, ¡Ay, Encarnación!, y otra la realidad palpable. Acaso sean las patas cortas, que sin otra velocidad de escape, trata de confundirse en el deseo cuando, después de haber pasado mas de un año de la prevista inauguración del llamado polietapico proyecto, el emblematico, incluyendo la nunca iniciada estación del metro en el metropol-parasol, esto ultimo en referencia a su epatante cubierta que, aunque inacabada, ya se advierte como sustrae el tibio Sol de las mañanas en Regina, invadiéndola con su sombra.
Solo unos párrafos de la amplia entrevista se refieren a esta Encarnación desnaturalizada, suficientes para captar lo que no está escrito cuando se lee: -“Ahora estamos esperando a que la empresa nos diga cuales son las complejidades en la colocación de las maderas”
En el pasado Mayo, la anterior voz autorizada decía otra cosa, pues con la llegada de las maderas, manifestaba que los trabajos de la colocación y revestimiento de los umbráculos estarían terminados antes de Navidad, agregando que la demora sufrida, por cuestiones técnicas y de seguridad, estas estaban superadas.
El entrevistado ratifica:-“En principio no hay problemas”. Lo que sucede es que “algo” debe pasar cuando lo que está previsto realizar en cinco meses, según la anterior responsabilidad, nos deja a la vista queda lo que es perceptible, pues si aplicamos la misma velocidad llevada en el “pegado” de los listones, para los restantes, la demora acumulada se incrementará al menos en ocho meses, lo que podría cuestionar el siguiente párrafo,-“El plazo sigue siendo acabar a finales de 2009”.
Lo que vendría a ser un total de más de dos años del tiempo previsto en los plazos de construcción, cuya reducción tuvo la consideración de una alta valoración en la mesa que determinó la adjudicación.
Finalmente se lee -“Nosotros cumplimos los pagos, y la empresa debe cumplir”.
Es evidente que el contrato establecía que todo debería estar terminado el día 5 de Noviembre de 2007, no sería de recibo afirmar tal cumplimento cuando recientemente se han venido a abonar partes atrasadas, y quedan otras pendientes, menos confiar en la parte contratada, que no cumplió su parte del contrato, generándole unas penalizaciones que nadie le exige. Más que duro lo tendrá con esto de la crisis para cumplir con su deber, sobre todo si se le recuerda que las celulas fotovoltaicas son obligatorias.
Sevilla 24 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

Ingredientes

Tres cosas

A quien escribe a diario una de las mejores columnas periodísticas del momento, le preguntaron recientemente por la formula que empleaba. Con sencillez respondió: fundamentalmente que entretenga, a ser posible que conmueva, y sobre todo que haga pensar.
Había olvidado decir, quizás intencionadamente, tener los valores de un superclase, conocimientos de erudito, preparación master, licenciatura “cum laudem”, capacidad de análisis, y dominio del lenguaje, entre otras muchas más cosas que atesora.
El amateurismo que ejerzo a través de esta sección de cartas, me hace reconocer los meritos de quien tiene que llenar cada día la hoja en blanco.
Ni imaginaba que podría llegar a escribir tantas, acaso fuera debido a que, sin saberlo, estaba utilizando los elementos bases, por mas que careciera de todos los demás.
Que haga pensar. Al menos ese es el intento de estos escritos que con el estilo “papuchi”, (raro, raro), siempre tienen a “esta” Encarnación, que antes fuera plaza de abastos, como motivo y causa. A tal efecto, intentan, e incluso en ocasiones logran, que no caiga en el olvido nada de lo que ocurre en este lugar, y que, aun sin proponerlo, si estos no hace pensar, cuando menos aparezca un fugaz recuerdo, el que se tenga, hacia la plaza de abastos.
Que entretenga. No resulta facil, pero buscando algo que pueda enlazar, lo mismo valen historietas que historia, noticias que anécdotas, declaraciones que comentarios, frases solemnes que paparruchadas, al objeto de que venga al pelo con esta Encarnación desnaturalizada con el fin de que no llegue, aunque pocas veces se logra, el temido aburrimiento del lector, y observe en estas líneas mas de lo mismo, de una rutina que linda con la pesadez.
Que conmueva. Complicado es encontrar este tercer ingrediente de la mixtura que, por desconocer la dosis correcta, en contadas ocasiones se acierta el justo punto. Tal vez utilizando la perseverancia, como sucedáneo, sin que esta llegue alcanzar poco más que un buen sabor de boca, sea lo que sin llegar a conmover, deja, por la machacona constancia que, en ocasiones, tengan vuestro reconocimiento, y eso si que es conmovedor.
Sevilla 25 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

viernes, 14 de noviembre de 2008

Nuevas fechas

Juego
Cuando en la provisionalidad se alcanzó el 88, ya se llevaban quince años aguantando en semejante situación, y era inimaginable pensar que se pudiera resistir veinte más. Acaso sea el desconocimiento que se tiene en la capacidad de sufrimiento.
Pocos son los vendedores que resisten esta suerte que les tocó vivir, prevista para tres años, bajos las chapas que evidencian, como aquellos, el deterioro del paso de los años.
Treinta y cinco años de provisionalidad en la Encarnación, se cumplieron en este que se acaba, y que, tras dos fallidas inauguraciones de setas rompedoras, se anuncia, en este final del ocho, que la laureada idea se encuentra en el 88, y solo falta el 12 para completar, salvo sorpresas, este polietapico y epatante icono, con su pequeño mercado.
La paradoja de la Encarnación, que fuera plaza de abastos, a la que el vaticinio del doble ocho, madeja-madeja, sea que por fin encuentra la reafirmación del criptograma, que viene a decir, madeja2.
Dejados. Dejados, como deja esto de la crisis a miles de personas. Dura situación, como la que se preparan a padecer los trabajadores de la cementera, con promesa de ayuda, si acaba por cerrar su periodo productivo a causa de la gestión y planificación de lo de la burbuja consentida, cuando hace poco tiempo promocionaba por el mundo edificaciones sostenibles, como lo de las setas. Dejados como constructora que pierde sus activos. Dejados. Madejados doblemente.
Parecería que todo era fruto de la maldición, aquella a la que hacía referencia una pequeña columna periodística, publicada hace años, en la que hacia culpable, con cierta ironía, de todo lo que acontecía por desnaturalizar la plaza, y que se cebaba en aquellos que le metieron mala mano.
El tiempo hizo cierto el vaticinio. La casuística quiso que, lo de la Encarnación, se llenara de fechas negras, fechas llenas del maleficio de la mano negra, como articulo que tambien se llegó a publicar.
Acaso la voz, la nueva voz, busque festivas fechas rojas cuando anuncia que el 12 que falta, se concluirá en el 10, con lo cual, en el baile de cifras, acabe como las previsiones para el fin de la crisis en el 11, rojo impar y pasa. Cosas del juego.
Sevilla a 14 de Noviembre de 2008
(la Encarnación vuelve a su casa)
Francisco Rodríguez Estévez

martes, 11 de noviembre de 2008

Luz en las sombras

La luz

Se nos acaba este año ocho en el que tantas esperanza de cambio estaban depositadas, y que resultó ser de lo peorcito. El tiempo de celosías es el que indica el coletazo final, para que el granate aterciopelado de sus flores mantenga el recuerdo de las ausencias, siempre presentes en toda memoria.
Noviembre nos trajo, además de “al elegido” 44, que suma ocho, como lo de la Encarnación, la silla para lo del G-7+1, que tambien suman ocho, al objeto de refundar el capitalismo, desde el socialismo. Acaso se entienda con el paso del tiempo.
En este de gori-gori en el que estamos inmersos, la discusión, jaula de grillos, se centra en lo de la luz (y taquígrafos). Una vez más hay que discernir entre poner la mortecina luz de bajo consumo, y mínimo alumbrado, para indicar la llegada del solsticio del frío, y la luminosidad que reclaman los comerciantes, especialmente los del centro, para que estas lucernarias adornen calles y plazas con motivo de las tradicionales fiestas navideñas.
No hay contradicción, tal como el periodista, columnista, historiador y colaborador quiere hacernos ver, cuando por un lado se reclama, evitar las emisiones de gases a la atmósfera y el ahorro energético, al tiempo que se desea que, por unos días, la ciudad tenga el brillo, aunque sea el de las luces, que la saque de la opacidad.
Puede que este gasto parezca oneroso, e incluso gravoso, para unas arcas endeudadas, que lapidan hasta el caudal que no existe. Es previsible que la producción de la energía para encender esas ascuas de luz que se demanda, genere tal cantidad de CO2, que su consumo le haría cosquillas, de pura risa, al que se factura por derroche en algunos establecimientos públicos,por no utilizar la energia solar obligatoria.
Tampoco puede haber contradicción en defender los árboles, en especial los que se talan con justificaciones imposible, y exigir el alumbrado para las fiestas de Adviento. Llega la Encarnación. Llega la Luz
Si la excusa para instalar las siniestras bombillitas es el de la emisión de gases, no corten árboles, ellos lo absorben. Si la excusa es el ahorro energético, dejen el coche oficial, y optimicen los aparatos de climatización de los despachos. Si la excusa es el costo, eliminen los almuerzos de trabajo. Si la excusa es salir de la llamada desaceleración, que se convirtió en crisis, y ahora es reseción, pregúntense que se hizo para que todo haya salido tan mal, y tengamos que pagarlo entre todos, como lo de la Encarnación.
Sevilla a 11 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

viernes, 7 de noviembre de 2008

Sueños encarnados

El sueño

Las palabras, emitidas por las ondas hertzianas, de quien los meritos en su colaboración semanal, de gran audiencia, son, que sepa, haber cambiado la blanca palidez, por el sustituto autorizado, fueron lo suficientemente contundente, como para que merecieran ser tenidas en cuenta.
Acaso fuera lo que hizo sentir al escucharlas, como el aire que entra por la rendija de la holgura de la desvencijada ventana, molesto y agradable, según la temperatura del momento.
Vino aquella frase a coincidir con la lectura de un texto periodístico que tambien hablaba de sueño. En este, expresaba el entrevistado, que salvó su vida por no quedarse dormido, si me duermo, me muero, afirmaba. Las que salían del viejo transistor aseveraban que era mejor el insomnio, que la anestesia. Tanto uno, como otro, nos mostraban sus testimonios acerca de lo despierto que hay que andar, si bien hay que diferenciar entre el sueño reparador, el que nos hace recuperar las energías, el sueño sanador, el sueño vital, con el de las ideas y de las metas, ese que no debemos de permitir que se nos imponga, y menos que usurpen a los propios permitiendo que en el se construyan los ajenos, por que serian como encarnaciones en reencarnaciones de las personas, en la ciudad de las encarnaciones.
Como una ciudad dormida en el sueño, como el camarón, que en las mecidas de río le vienen visiones de bogavante, además de no advertir que otra corriente le arrastra, siempre acaba en las redes, en este caso, camaroneras.
Sueños de encarnaciones, encarnación de la Alameda, encarnación de piel sensible, encarnación de Altadis, no se cierra, encarnación de árboles talados, encarnación de fabrica de vidrios de la Trinidad, encarnación de Santa Catalina, encarnación de palacio Pumarejos, encarnación de huerta del Rey Moro, encarnación de la fabrica de sombreros, encarnación de las Palmeritas, encarnación de Prado de San Sebastián, encarnación de eco-orilla, encarnación de pepino gigante, encarnación de peatonalizacion, encarnación de semáforos descoordinados, encarnación de autobuses lento, encarnación sin coches, encarnación del arqueológico, encarnación de plaza de España, encarnación de Fibes, encarnación del “moneo” perdido, encarnación de la ciudad del caballo, encarnación del “aquarium”, encarnación de la sostenibilidad, encarnación de provisionalidad eterna, encarnación de encarnaciones, encarnacióndesevilla.
Al pasar la hoja del diario se lee “Multan a un bombero, por apagar un fuego”.
Sevilla a 6 de Noviembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Siempre, el mercado

La crisis del mercado



El comentario televisivo de un especialista en economía, establecía hasta tres fechas distintas para que la cosa empiece a normalizarse. Se refería a la crisis, y sus consecuencias en el mercado.

Descartada la de finales de 2009, pasó al verano de 2010, y remató en la primavera de 2011, justo como lo de la Encarnación. Lo que viene a decir, que será cuando se acabe. Parecía que la cronometrica fuera intencionada para determinar que se acabará antes, la crisis, o el mercado.

Otros indicadores económicos, los más pesimistas, vaticinan que hasta el 2018 llegaran algunos coletazos. Trecho largo, para realizar previsiones acertadas.

Coincidirá para cuando la nanología aplicada en la energía solar alcance la cuota prevista del 30% del consumo eléctrico, como medida eficaz para la reducción de las emisiones del CO2, y hacer frente a la inmediata crisis de los combustibles fósiles en el mercado energético. Siempre el mercado. Habrá que esperar para saber el grado de acierto.

Pero lo que no podremos saber, hasta que se produzca, si es que le alcanzamos a ver, será el trazado del metro hasta la estación “metropol” de la Encarnación, y si las celulas fotovoltaicas para la sostenibilidad, cubrirán ese “parasol”, rompedor y de vanguardia.

Hasta entonces, pase lo que pase, el mercado continuará sumido en la crisis.

Sevilla a 4 de Noviembre de 2008-

Francisco Rodríguez Estévez

Estaba escrito(y publicado)

Pasos de misterio



Hubiera bastado conocer el testamento para saber el reparto de la heredad. En repetidas ocasiones quedaron manifestadas sus intenciones revelando el prometido destino para premiar la fidelización de un final feliz.

Todo parecía indicar que seria como un regalo, un premio, una prebenda a los seguidores, (por los que muere, se le oyó decir), del que quedarían privados todo aquel que no escuchara sus palabras.

El final, no por anunciado, devino en lo contrario, y comenzaron los pasos de misterio.

El caso es que la operación, llevada a cabo injustamente, dejó a sus partidarios atónitos y desvalidos como huérfanos, al modificarse el viejo testamento por uno nuevo.

Así la voluntad quedaba escrita, cuando a pregunta del gobernador impuesto solicitando la respuesta del pueblo, este, de siempre sabio, contestaba que mejor prefería al chorizo, ¡que mala es el hambre!

Nada nuevo se argumenta en estos, cuando la turbamulta se dirige, y elige lo que elige, con tal de que el circo tenga sangre, aunque para ello se haga el harakiri en sus propias carnes, ¡ay, Alameda!

Acaso como la Encarnación, con sus pasos de misterios, tambien tuviera escrito ese destino determinado, para enrojecer, como chorizos, a todos sus herederos.

En cambio en el antagonismo cromático, donde la mayoría es una, con pasos de misterio, haciendo liquidez en tiempos de crisis, deshereda a las criaturitas. ¡Que cruz!

Sevilla a 4 de Noviembre de 2008