miércoles, 1 de octubre de 2014




Rumores de dos

Se dice que lo de la Encarnacion es cosa de Sacyr, y que ni la Delegacion de Consumo, ni mucho menos la Cooperativa de Comerciantes tienen nada que decir en cuanto a lo que concierne al laberintico mercado, antes plaza municipal de abastos.
Cuesta creer lo que se rumorea, pero este rumor se hace tan verosímil que no tendría caso que no fuera verdad y todo se debiera a propaganda goebbeliana, malintencionada que de tanto decir, se hacía cierta.
La pregunta es por aquello de la concesionaria- constructora para la obra de la Encarnación, que como recordaran tenia una anterior UTE adjudicada, en inico de obra, con cimentación perimetral y excavación arqueológica en curso, que por mas tuviera cierta precipitacion, e incluso con primera piedra, y aunque se olvidaran del arquitecto, a cuento de que, ni se sabe para que tuviera posteriormente un nuevo concurso de constructores, sin duda para que apareciera esta sin mayor merito que una cuestionada postura a la baja, y plazos imposibles, y se alzara con la nueva adjudicación de la misma obra.
Adjudicación que se merecería revisar en el recuerdo, cuando menos los términos ganadores, de menor tiempo de realización, e inferior costo, al menos por saber por cómo se llevó el proceso para que esta resultara vencedora, por muy tarde que pueda parecer.  Triplicado el costo y cuatro años de demora, bien merecería la pena, la memoria histórica..
El resultado fue para la elegida constructora, que llevaría implícito para la recuperación de lo invertido, una plural forma de cobro en metálico y especies, por un total en cuantía mas que suficiente. Para ello un extraño documento que le hace privatizar el mercado de abastos municipal por el cual,  a los placeros del mimo, se les  encierran con dos obligaciones bajo setas, pues la indefinición se hace general, no solo en los espacios, también en las responsabilidades y obligaciones en el multidisciplinario Metropol-Parasol, tanto de la administración, como de la concesionaria, y el respeto a los derechos de los vendedores procedentes de mas de treinta y siete años de provisionalidad.  ¿Titulares de licencia municipal?, ¿ Ahora arrendatarios?, ¿Subarrendatarios?
A continuación viene la otra, por aquello de que también resultara elegida la misma constructora para la gestión del conjunto micologico, es decir, se privatiza todo un espacio municipal que le generará algún beneficio,(el doctor predijo que tal cantidad se alcanzaría en dos años) pues se trataba de pagar el el capricho, aparte de la importante cantidad que en efectivo hace la Administración,(cercana a los dos tercios del valor real) y a todo esto se le añade la explotación, para el uso que determine la adjudicataria, de un gran edificio de propiedad municipal por un periodo de tiempo de cuarenta años, al parecer a contar desde el momento de iniciarse la explotación del resultante. Lo que hace que pueda ser cuando menos revisable, para así evitar los perjuicios  que ocasione a las arcas municipales.
Por último, contra todo pronóstico, también se le adjudica la gestión, mantenimiento, y conservación, limpieza y vigilancia incluidas, lo que hace crecer a esta constructora de imposibles, ahora convertida en concesionaria-adjudicataria,  adquiriendo  a su vez una mayor cuota de poder, no solo por lo que correspondía, mas al sumar la parte llamada plaza municipal de abastos, incluyendo la subvención generosa para cada puesto, por el ajuste político.
Por si pareciera poco se le permite también , acaso en acción de gracias, que se le añada a los beneficios que se obtengan, todos los que emanen de icónico conjunto, por más que nunca se llegue a conocer el verdadero valor de lo que allí se ha invertido, pues las cantidades que se rumorean, parecen excesiva, para ello basta comprobar las calidades que se emplearon, y cuando menos, la verificación llevada a cabo por una  empresa que certifique la justificación del costo de los mismos.
El rumor ahora está en preguntarse qué motivos tendría una empresa constructora especializada en grandes obras, y mayores modificados, para aceptar la gestión de una edificación de conglomerado de maderas, con pegamento inventados ex profeso, que, conociendo la debilidad de su construcción, y sabiendo de antemano que su mantenimiento seria desmedido, a cuento de que se embarca en ese empeño aparentemente de dudosos resultados.
No en vano, hasta en dos ocasiones ha pretendido desligarse de estas setas, puesto que una vez cumplido su objetivo, públicamente considera esta concesionaria que, por imposible, por mas que en hacer lo posible, como que no logra los beneficios que se preveían.Evidentemente eran números en el pape para equilibrar.
 Y es la respuesta a la pregunta, que se contesta después de cuatro años, pues de no haber sido así, cualquier empresa que hubiera optado a la concesión en su día, hubiera puesto de relieve de inmediato que, aparte de la propaganda, aquello con error, tras error, evidenciaría que se trata de un mal negocio.Números rojos,numero de funanbulismo de difícil equilibrio.
Hoy,  con la actitud de prepotencia de la Concesionaria Sacyr, y la laxitud de la Administración, aquella procede ha realizar nuevos números de riesgos sin calcular las consecuencias, al alquilar unos puestos preparados para la venta de pescados por la titularidad de las licencias, y comprobables por el diseño de los mostradores específicos que por distintas causas fueron muy malos negocios, y  lógicamente a fuerza de perder dinero, sus titulares acabaron bajando las persianas.
Y es en eso, que, siendo estos puestos desocupados de  titularidad municipal, hoy se le permite a la concesionaria, en su  libre albedrío, llevar a cabo un alquiler a la baja,  y no solo lleva a cabo este proceso de índole exclusivamente municipal, si no que ademas autoriza, con el poder adquirido y no frenado,  que alegremente se lleve a cabo el cambio de especies, todo ello con la permisividad de la Delegación, por lo que tal acción, sin duda alguna, altera sustancialmente el documento firmado con los comerciantes que procedían del mercado provisional, por cuanto en este estaba claramente explicito el número de puestos , y las especies que cada uno tenía autorizada por la Delegación de Consumo.
No dándose motivo que justifique una ampliación como la llevada a cabo,que se hace disturbadora, por cuanto los comerciantes de la Cooperativa, en su mayoría considera, que se lesionan los intereses generales.
Sin duda la cooperativa de comerciantes, como representantes del colectivo viene a ser en esta situación mera comparsa, y no le queda más atrás la Delegación de Consumo, por cuanto deja permitir la suplantación en actos propios, a la concesionaria, en especial en materia de la aplicación del cambio de uso , y  por consiguiente en mostrar la autoridad que no puede tener en los conceptos realizados, y de una inadmisible permisibilidad municipal al cambio de especies, sobradamente abastecida, cuando en esta plaza de abastos que tanto tendría que exigirse a la concesionaria, en las materias que las en las propias deficiencias se hacen patente como plaza municipal de abastos, y así nos va la cosa. De rumor en rumores
Sevilla a 1 de Octubre de 2014                                                                                                                   Francisco Rodríguez Estévez

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