domingo, 31 de marzo de 2013




Entera
 

No puede haber error, salvo el consentido, en lo de la Encarnación, pues los responsables están mas que enterados de que lo de las puertas a lo que llaman mercado es un verdadero desafío  al la deficiencia, y es que aunque quisieran no se puede hacer peor.

Otra cosa es que aun estando sobradamente informados y sabiéndolo perfectamente, administración y concesionaria, que ambas partes, ya sea bien al alimon, o por separado, una vez comprobado los efectos que origina esta aleatoria colocación de las puertas, pues resulta incomprensible,  que después de mas de dos años, que estas no hubieran actuado, cuando menos optando por la solución de abrir nuevas puertas, y por supuesto automáticas para cumplir con la Ley de Accesibilidad.

Otra cosa es que no escuchen, e incluso cabe la posibilidad de que no quieran oír. Seguro que, aunque son dos las responsabilidades en el contrato entre partes que existe en lo de las setas, que estas no son mitades de un todo por mas que la obligación de ambas sea entera cuando recae tanto en una como en la otra, al menos mientras se entienda que la plaza municipal de abastos de la Encarnación, es la parte publica no privatizada del polietapico y multidisciplinar complejo de lo de las setas, icono de la indignación que también son conocidas como el capricho.

Sobradamente saben que cada día continúan las personas buscando una puerta justo donde al alemán ni se le pasó por la cabeza, pero que el tiempo dice que era la mejor ubicación para colocar una puerta diríase que principal, pues tendría una ocupación en donde estuvo otra, la de Neptuno, en el demolido mercado.

Viene a recordar esto del mejor trazado y optimización del recorrido al ingeniero burro, que no es otro que esa acémila que encuentra, solo con su instinto, la mejor trazada para realizar un camino que una dos puntos en un terreno escarpado.

 Ni que decir tiene que esto es una broma universitaria, de primero de ingenieros.  Así me la contaron. Con esta premisa mas nos hubiera valido el sabio burro para la garantía de la optima elección de las entradas y salidas de esta laberíntica plaza municipal de abastos, supervisada por la gerencia de urbanismo, y la delegación de consumo, pero no fue tal el animal que para el acierto se dispuso ya que al tener como tal a este alemán que en plana superficie, y galimatico diseño, no tuvo en cuenta las entradas y salidas naturales, solo hizo para sus risas esta tontería, aparte  de una barreduela de cristal, escaleras para nada, huecos al vacío, monteras basurero, pasillos bar, husillos ineficaces, puente sin seguridad, azotea para la indignación, mirador en perdidas, lo cual generó tal vanguardia que los palmeros destrozaron sus manos batiendo el aplauso a la modernidad.

Es posible que si la responsabilidad se entera, que no sea a media, y bien por que escuche, mejor si lo comprueba que si los aplausos se apagaron en su día,  ya es tiempo de poner soluciones, y nada mejor que comenzar instalando la puerta, sí, justo donde la busca el publico, en la travesía central, lo demás, será seguir en la tontería.

Sevilla a 31 de Marzo de 2013

viernes, 29 de marzo de 2013







Tres primaveras

 

Debe de ser por algo, y que no parece que sea bueno, para que a lo de las setas no les vengan bien, por ahora, las primaveras. Estas van pasando como sin esperanza, cuando la Esperanza no pasa, cuando así van las tres pasadas.

Es esta la tercera, desde que en la Encarnación se inauguró lo que llaman mercado. Evidentemente no tuvo una buena fecha para abrirse aquella, justo el día después, cuando la Esperanza ya había pasado, por lo que esperanzados solo cabía esperar que al llegar la primavera esta pudiera traer a la Encarnación la Esperanza de nuevo hasta esta nueva andadura de los placeros, después de los tiempos vividos en la provisionalidad.

No pudo ser en aquella ocasión esperada, por mas que se especulara, si fue la lluvia lo que impidió que la Esperanza pudiera pasar, como siempre, (acaso por primera vez), aunque poco importaba si tuviera lugar por debajo de aquello, si quienes esperaban la ocasión eran los pocos placeros que, al retornar allí solo hacia unos meses, habían iniciado una nueva etapa para ocupar un lugar en ese sitio, que por los tiempos del miedo tuvieron que abandonar.

Por segunda vez, en la espera, le llegó de nuevo la primavera a esta Encarnación desfigurada. Era el tiempo en el que la nueva andadura de los nuevos responsables ya se había advertido que a lo que llamaron mercado tenia, entre los muchos signos del icono del desacierto, que al mercado no le dispusieron las puertas con una miajita de sentido común, y se comprobaba sin dificultad que la travesía central, de lo que debería pensarse en plaza de abastos municipal, pues carecía de esta puerta de primerísima necesidad.

No pudieron llevar a cabo, o no supieron hacerlo, o no disponían de caudales, ni las promesas dadas, ¿pero como, aun no esta lo de la puerta? ni para cumplir la Ley de Accesibilidad, pero al menos ante la muchedumbre de fieles que en su paso acompaña a la Esperanza, tuvieron a bien, y no sin dificultad, a acceder a colocar la red, de protección de un lucernario al vacío, otra tontería en lo de la Encarnación, y   que tan reiterada veces, como por la puerta, había realizado a las distintas responsabilidades. La lluvia aceleró el paso. Vista y no vista la Esperanza por el paso de lo de la Encarnación.

 

En esta tercera, el servicio metereologico avisaba de los riesgos de lluvia, y la esperanza se ponía en que estos sufrieran el error, como una puerta inexistente, para que le diera salida a la Esperanza.

Y la noche, que no se equivocó, abrió sus puertas de esperanzas y se hizo día, pero la Esperanza no pasó, ni paseó su paso, por Encarnación descarnada desfigurada, sino que sus pasos fueron por Amor de Dios buscando un camino nuevo. El día se hizo noche, y aun no se advierte que sea la puerta causa para que  ocurra que la Esperanza incluso tome otro camino.

A paso de mudá, que corta se hizo la espera de cuantos esperaban, que largo camino, que corto es el tiempo.

martes, 26 de marzo de 2013


Desde Alemania

 

 

Tres ingenieros, para las setas de madera y un capataz para los andamios.

 
Tuvieron las setas tres ingenieros que dirigieron la colocación del rompecabeza de tablones conglomerados, revestidos de poliester, sobre el colosal andamiaje que con felina destreza ordenaba el equipo del “chino” llevando a cabo el montaje de la enorme estructura de tubulares.

Con el tiempo, y el jamoncito serrano de bellota con el que tomaban el bocadillo de las diez, fui creando tanto con los ingenieros alemanes, como con el capataz de los andamios un vinculo amistoso, pues aunque en principio este fuera tenso por cuanto les mostraba mi desacuerdo con lo que se estaba llevando a cabo, obviando que nada menos que aquello que repudiaba, era precisamente los trabajos que ellos tenían que realizar.

Siempre me dieron la razón, pues a cada momento aparecían dificultades, no había día en el que no tenían que resolver algún problema, generalmente estudiando soluciones de urgencias con una nueva improvisación, por algo mas que un capricho a lo que se le acababan los plazos.

 El primero de los ingenieros cuando se marchó dejando “la obra” me comentó que no estaba de acuerdo de cómo se estaba llevando a cabo, y aunque su español no era muy bueno, supe que su  disconformidad le llevó a incluso dejar la empresa de la madera.
El segundo tenia nostalgia de su país y echaba de menos sus hijas pequeñas, a las que le hubiera gustado haberla traídos para la feria de aquel año de 2010, pero se marchó por cuando no le gustaba  como se estaban llevando la cosa.
Por ultimo el tercero, acaso con el que tuve mas confianza, y que aguantó hasta el final, muy a su pesar, y a la demora, pues ya se había despedido de la empresa, imaginen los motivos, con anterioridad, y segun contrato, por lo que le retrasaba su prevision de acudir a otro lugar del mundo. Ya  con el mercado inaugurado vino a despedirse acompañado por todo el staff técnico de lo de las setas, y de paso adquirir algo del jamoncito que facilitó su permanecia en este disparate.

Lo hizo con una cierta guasa, acaso irónica, de lo que nos habían dejado, acaso lo que cabía sospechar por toda la información que por el vínculo amistoso, me llegaba de los técnicos y de los operarios. Pero saberlo no servia de nada, pues la orden era acabar aquello, y lo acabaron, cuando menos inaugurando el llamado mercado bajo una estructura de tubos y con una fachada falsa de madera, que los hombres del “chino” tuvieron que montar a toda urgencia.

Hoy ha venido una señora acompañada de otras dos mas jóvenes, no podía imaginar la nota que traía en la mano, cuando me pregunto en correcto español, ¿usted debe de ser Paco?

Traía un saludo escrito de su hijo, nada menos que de uno de los ingenieros que estuvieron trabajando en las setas. La señora me contó que su hijo le había contado muchas cosas de mí, al punto que me conocía perfectamente. Ha sido un encuentro muy agradable, he aprovechado para devolverle su recuerdo y mandarle un abrazo, que le doy a su madre. Se marcha para Alemania. Ha venido para ver las setas, y en confianza me dicho que su hijo le dijo que yo tenia razón,………………………..Por el momento a ella tampoco le gustan, que no es poco, y eso que debe de tener información privilegiada.

El tiempo nos dirá si  las improvisaciones tuvieron un acierto duradero, siempre y cuando tengan el mantenimiento que requieren, pues malo será que los temores que por criterios diferenciados tuvieron los ingenieros como para abandonar el montaje, tengan en el futuro motivos de preocupación.

domingo, 24 de marzo de 2013



 

 
 
 
 
 
El doctor que preside la Corporación contesta a las pregunta de los periodistas les formulan acerca de lo de la Encarnacion, y este contesta diciendo que la Encarnación es UN PROYECTO DIFICIL DE EXPLICAR, y balbuceando incoherencias misteriosas, dio por zanjada la entrevista.


Un proyecto difícil de explicar
Como aquello de los misterios inexplicables, nunca se sabrá si fue antes el huevo que la gallina. Así nos quedamos, al conocer por lo dicho, que lo que no se puede explicar, nunca se llegue a comprender, y lo que no tiene explicación, además de inexplicable, cabe pensar que tampoco se sabe explicar.
Lo de la Encarnación, misterio inexplicable, resulta que no se sabe explicar por quien debería de hacerlo, y por lo tanto no se puede comprender, (cosa que estaba prevista), pues lo de tanta modernidad no era cosa fácil de digerir.
Pero hay algo tan cierto e importante, como para que quedase recogido en la prensa, que la idea del mega-aparcamiento de la Encarnación, tenía su autoría con firma y rubrica, al igual que lo del mercado-sótano, tan aplaudido por los placeros, que destrozaban la Hispalis, de la que por los estudios realizados, se tenía sobrado conocimiento de su existencia.
Acaso, lo que no se pueda explicar sea lo de la sostenibilidad, posiblemente el ignoto costo, y lo de la vanguardia, que decir  si esta se tiene que buscar en el pasado mas “agujereado” del Imperio, por no decir lo de la originalidad, si se nos viene a la cabeza Metz y Hannover.
En el autobús de línea,  un video expone un pensamiento, una frase atribuida a Confucio “Hacer, sin aprender es inútil, sin pensar, temerario”, y no se por que me recordó lo de la rampa en Imagen. Y es que lo de la Encarnación, como todo lo inexplicable, siempre será un misterio.
Sevilla a 2 de Septiembre de 2008
Francisco Rodríguez Estévez

 






                                                                    
                                                                   
 Dialogo mudo  
                                               




 
Mientras imagine que sigues ahí, que no te has ido, que permaneces para entender lo inteligible del asunto, estas líneas escritas distará mucho de quedar convertidas en un soliloquio grafico de vana utilidad, motivo por el cual continuaremos manteniendo este dialogo mudo, pero no callado, que sobre lo de la Encarnación, ¡ay Encarnación!, empezamos a trabar entre la palabra escrita con caracteres nebrijanos, y el confidente lector, cuando con la sonrisa advierte lo que esconde el disparate.

La deformación profesional del doctor en excedencia, le hace tomar medidas médicas, disfrazadas de políticas, obligando en prescripción facultativa el cumplimiento a todo hijo de vecino de esta callada mariana, a tener que caminar buenos trechos para bajar los índices de glucosa y colesterol. Receta que tan alegremente nos hacen los políticos, convertidos en sanadores, velando por nuestra salud, cuando nos prohíben el nocivo tabaco, que tanto recauda para el saneamiento de todos, pues todos somos Hacienda.

El disparate de las medidas es culpa de la artrosis, no de la peatonalización, pero las caminatas se las trae. Una vez alejadas las paradas de autobuses, a nada que se apaguen los cirios, llegar a la Encarnación, desde Osario, dejará para el arrastre a todo aquel que no disponga de una buena osamenta y una dinámica masa muscular, para recorrer los siete hectómetros que la separan de la nueva terminal.



El obligado paseo, con seguridad, restringirá su acceso a muchos clientes viandantes, con lo que además del azúcar, bajaran los arqueos de las registradoras, por mas tiempo del previsto.

El cajón de la interminable obra, de momento, y a pesar de que nadie cree en lo que es solo una intuición de observador, no llevará el metro en sus entrañas, (que quedará, si la hubiera, para otra ocasión), a pesar de que fue, por su germánica solución, objeto de premio, ni tampoco los aparcamientos en su alrededor, que tantos puntos obtuvo del jurado la ingeniosa solución teutónica y utópica, del ya te veré.

 Naturalmente esperaran otra ocasión, tampoco es el momento. Así pues, el almacén de acopio instalado en la calle, entre las dos plazas, ocupará por demasiado tiempo el excesivo espacio autorizado, sin reparar en los daños colaterales que sufrirán aquellos que tengan que multiplicar sus cansados pasos, por unas urgencias que se nos antoja improvisadas, de política de prisas, lo que deja un rastro de cacosmia, que lo de las phaloides, por muy amorfas que parezcan, semejará a un channel, canal abierto o de pago, como el” recto”, calificativo del proceder. Al final el hito, como siempre saldrá “mojon”

Francisco Rodríguez Estévez

Sevilla 8 de Abril de 2006

 

viernes, 22 de marzo de 2013

Seis de marzo de 2007




Pobre ciudad
Aunque parece ser que los informes económicos no reflejan una bonanza de caprichos, sino mas bien de apreturas, pues como que no conviene airear el saldo de la cuenta corriente si se quiere estar en el club de las elites, lo recomendable, para no ser detectada en lo cortita que se anda en el fondo del monedero, debe de ser comprarse un gran bolso, a ser posible de firma.
La callada mariana, anda a dos velas, pero exceptuando por como le esta quedando su desfigurada cara, de tanto lifting, como que no hay quien se lo note.
El informe Icomos, como que llega tarde, siempre le llega a esta Encarnación de mis carnes todo tarde. Pero, de todos es sabido que, ni aunque hubiera llegado a tiempo, se tenia la remota intención de recuperarla, ni como plaza, y menos como plaza de abastos, puesto que primero con el mercado sótano y los aparcamientos, y luego con el “in situ” y el dedalitos, no se estaba por la labor de recobrar el esplendor comercial de su ayer, y vistas las actuaciones, que decir del histórico, ese que obliga a salvaguardar el pasado.
Estaba visto el percal, desde que” las setas” deslumbraron al foráneo jurado encargado de dirimir las bondades, por lo que aquella agrupación de setas ya justificaba la ardua tarea selectiva, y los bien abonados emolumentos, y poco podría importar lo que ni Icomos, ni nadie viniera a decir al respecto.
Acaso, y sería doloroso, no se sabía en el selecto plantel, todos doctos, ni en la Secretaria montada al efecto, ni en las delegaciones afectadas, ni por el trío escabel de la vanguardias, ni por tantas personas que conforma el corporativo elenco, ni por las asociaciones de notables, ni por donde se imparte el saber y la docencia, ni por los ilustres, y ni por lo cesantes, para que nos tengan que decir desde un foro internacional algo tan elemental como “EL PAISAJE DE SEVILLA, ES MUCHO MAS IMPORTANTE QUE LA CALIDAD DE UN SOLO EDIFICIO SI LA RELACION VISUAL DE LA CIUDAD PUEDE VERSE ALTERADA POR ESTE”.
Partiendo de que lo de las setas, mas que un edificio, debería ser llamado elemento, menudo elemento, caprichito arquitectónico, cubierta epatante, e incluso interpretación de una original gasolinera, por mucho MOMA, mucho premio, mucho sostenible, y mucho de vanguardia que se nos quiere hacer ver, donde nada puede verse, pues la Hispalis desaparece en la agresiva cimentación, el mercado de abastos central, será una broma, y la cúpula de la Anunciación, (monumento protegido), quedará oculta para siempre en ese eclipse “parasolar”.Del metro ni les comento.
Cabe pensar, si en el proyectado antiquarium, con acceso por rampa (por aprovechar), o en el aludido, que no proyectado, planetarium de luces, con accesos por rampas y escalinatas, se buscará un lugar para colocar, a falta de mitorajes de buen tamaño, y mejor precio, donde Cultura, al menos instale el marmolillo salvado de San Laureano, piedra llorosa, puesto que estas setas ni tuvieron primera piedra, ni foto al uso, para que al verla, recordemos que sobre ella tuvieron lugar los repetidos lamentos de aquel Alcalde de otro tirmpo que compungido decía: “Pobre ciudad, pobre ciudad”.
Francisco Rodríguez Estévez
Sevilla a 6 de marzo de 2007






jueves, 21 de marzo de 2013



Setas de huevo, de tomate y huevo
 

 

Urbanismo cierra otra vez la puerta de salida a Sacyr en las setas. Sacyr no abre la puerta en el mercado  municipal de las setas. El Ayuntamiento no se pone de acuerdo con Sacyr, para abrir la puerta que cierra. Manda huevos que lleve esperando mas de dos años para que instalen una puerta para que el publico pueda entrar e incluso salir del laberinto, y el galimatías de los responsables vuelve como en los tiempos de la Alameda, pacto de progreso.

Puerta para cumplir la Ley. Puerta para entrar. Puerta y puerto. Puerta de emergencia. Puerta del Cielo. Puerta oscura. Puerta automática. Puerta de Ceres. Puerta de Sacyr. Puerta para salir. ¿Pero donde está la puerta?

Las responsabilidades, tanto la primera parte contratante, como la segunda parte, ahora andan a la gresca reclamando cantidades por conceptos diferentes, deudas según la interpretación que cada cual hace de lo contratado. Uno por otro y la puerta sin abrir. En especial la que a todas luces corresponde para el mejor recorrido la puerta de la Travesía Central indispensable para optimizar un mercado de diseño papuchi (raro, raro)  al que visto lo visto, cuesta explicarse como las Delegaciones pudieron ser tan laxas, y la constructora-concesionaria-adjudicataria, tan distraída en el cumplimiento de lo establecido en  edificios públicos.

Sacyr se encuentra con la puerta de salida cerrada por el Ayuntamiento, y el Ayuntamiento no tiene entradas. Sacyr no puede abrir la puerta que le cierra el Ayuntamiento, siendo este distinto a aquel que en la huida tanto otorgaba en su silencio, pero este no le va a la zaga cuando cierra puerta en lugar de abrir esta puerta que por inexistente se hace mas necesaria y que le daría algún sentido, no a las setas, cosa harto difícil, pero al menos para que aquello pueda parecer un mercado municipal, especialmente para cumplir con la Ley de accesibilidad de los edificios públicos, sin que existan diferencias entre las partes con responsabilidades .







 

 

 




 



 


En el agujero









En el agujero que llaman lucernario volvieron a poner la red. El absurdo vacio, es acaso el remate a modo de "filigrana de la nada"  de la escalera de poniente, hoy clausurada ante el temor que se acabe convirtiendo en  el lugar de ociopara la juventud, que  tal era la propuesta teutónica, tan aplaudida por aquel entonces.

Semejante “adorno” es en su sinuosa prolongación,( en lo de las setas todo es sinuoso), una barandilla,  que mas pàrece brocal de un pozo sin agua, donde la caída sobre el granito ni les cuento, y cuyo eliptico pasamano da inicio al la barreduela de cristal, justo donde demasiadas personas buscan la puerta inexistente que al antojo del alemán, se convierte en un engaño permanente.
Es algo corrregible pero que por el momento ninguna de las partes con responsabilidad tiene la menor intención de darle ninguna solución, ni por fácil que esta pueda ser.

El agujero, que ni es claraboya, ni tragaluz, al ser solamente un agujero, no está exento del peligro que cualquier tontería que pueda costar el asomarse.Sobre todo si a tomado mas de una cruz. No me fue fácil conseguir que se pusiera una red, ahora hace un año, pues a todas las partes puse en alerta de este riesgo existente, lo cual fue suficiente motivo que al colocarla sirviera para reconocer que aquello es un verdadero peligro diario y no solo en la Semana Santa.

El caso es que de inmediato quitaron la red,  y ahora la volvieron a colocar, lo cual evidencia una total falta de responsabilidad, por cuanto sabiendo que al retirarla no se evita el gran peligro que existe durante el resto del año.

Otra cosa seria que fuera lucernario fotovoltaico, que no vendría mal para la sostenibilidad, y cuando menos para que con el ahorro energético, poder pagar la puerta automática para cumplir la Ley de Accesibilidad.

Lo mismo también se puede poner un suelo de material traslucido y lo suficientemente resistente como para que pueda ser pisado, en parte, pues quedaría reducida la barandilla  en un recogido mínimo, un adorno en curva que marque el camino de la nueva puerta al coincidir con la travesía central del llamado mercado, y ni les cuento si al la columna existente se le retira todo el añadido de formica y colocamos a la escultura de Ceres. Pero eso es otro tema, estamos en lo del agujero, al que al menos por unos días, gracias a que pusieron la red, ha dejado de ser un peligro.

Sevilla a 21 de Marzo de 2013

Francisco Rodríguez Estévez


miércoles, 20 de marzo de 2013

Detenida en el tiempo

Como no lo propuse, jamás imaginé que alcanzaría a reunir tal cantidad de artículos periodísticos, fotos , comentarios de opinión, y cuanta información que tuviera relación con la Encarnación, pero ha sido el tiempo un elemento imprevisto y fundamental, para que hasta la fecha, estos tengan un considerable volumen, mucho mas amplio del que en un principio cabía pensar.
Lo cierto es que se siguen acumulando las paginas de su recuerdo, esperando facilitar alguna tesis doctoral a la dilación, a la indolencia, e incluso al disparate, en dos voluminosas maletas que superan los cien kilos, (barrera vaticinada por un director general como medida limite que pondría fin a esta historia), y que si lograron tanto peso se debió sin duda a la colaboración de muchas personas que sabedoras de tan inútil coleccionismo me ayudaron a lograr esta empresa de Guinnes.
Destacan en este apócrifo archivo, de tan variada procedencia, los que llegaron de publicaciones del Japón, de Holanda, de Cataluña, así como los editados en medios hoy desparecidos, Sevilla, Hoja de los Lunes, Pueblo, La Verdad, Nueva Andalucía, Claro, La Voz, Sevilla Centro y La Voz de Sevilla.
Recientemente me han enviado una foto en blanco y negro, de un postrer reportaje realizado, según dice el autor, de los últimos momentos de la desaparecida plaza de abastos, pues me asegura que fueron tomadas el día anterior al de su definido cierre.
Esta, que forma parte de un amplio trabajo documental, está tomada en el interior de de la cuartelada del pescado, en la que puede comprobarse la remodelación que unos años antes se llevaron a cabo en esta nave, destacando las claraboyas de luz que antes carecía y la elevación de su techo.
El objetivo, disparado al azar, captó un grupo de señoras, mirando el genero, que lucen aun ropa veraniega, floreada y corta, según la atrevida moda marcada por un La, la, la que triunfó en Eurovisión. En la instantánea aparece un Vacila joven, aun desconocido del publico televisivo, que en su actitud parece pregonar el guay de las mulatas mas frescas, a unas mujeres que, cestas en mano, guardan cola delante de un pequeño mostrador desde el que regalaba gracia. Determina con seguridad la hora tardía del momento por el resto que se ofrece, no mas de media docenas de piezas, no caben dudas que serian ofrecidas a un buen precio, con el fin de evitar en el debut de la provisionalidad inmediata, que estas que lucen bajo las dos bombillas con lámparas de plato el esplendor de la plata y el frescor en las agallas, no fueran bajo una capa de hielo machacado con el mazo de madera, la mejor referencia para iniciar una singladura de mas de treinta y cuatro años.
La escasa nitidez de la ampliación, nos descubre como el que parece ser Caputo ofrece, para gato, un pequeño montoncito de jureles, y lo que pueden ser dos rayas. Como queda dicho la altura del techo y la luminosidad de las claraboyas, se debió al la intervención que se realizó en esta cuartelada ante el peligro de desplome de la vieja cubierta construida en 1820, y fue sufragadas entre todos los pescaderos. Tal vez como el ultimo intento de salvar la plaza de abastos, pues al poco tiempo, afectada por la ruina la cuartelada de la verdura, mayoritariamente ocupada por los hortelanos venidos del Aljarafe, que no tomó el ejemplo de los pescaderos, produjo con su hundimiento, lo cual, junto a la nula intención de estos vendedores por recuperar un espacio harto lúgubre por su abandono, donde la oscuridad y el hacinamiento eran notables, crearon los condicionantes de una aceleración por salir, en una diáspora fomentada por los propios vendedores, que la llevaron inexorablemente a su demolición. El tiempo detenido, apenas ha cambiado nada, si acaso en que las pescaderías, ahora, presagiando el tiempo de sombras que acecha, cambiaron las precarias bombillas de entonces, por numerosas y preciosas farolas de luz fría, algunas de aires marineros, para llenarlo todo de luz, acaso para poder ver cual fresca siguen estando las japutas, y como brillan los ojos de los besugos en sus lechos de nieves.
Francisco Rodríguez Estevez
Sevilla a 30 de Enero de 2007


 

martes, 19 de marzo de 2013







Algo que las justifiquen

 

Aparte de que todo hace indicar que el brote lo propició el capricho, y no una decisión contrastada de modernidad, y como lo anterior tenía otra mano, ¿o era olivo?, no deja de ser evidente que el gusto por las setas, aquí no será una moda pasajera.

Y es que da la mala espina eso de que el revuelto tenga que tragarse, si es que no quiere quedarte sin comer. Zeta y sopa.

Mala opinión será siempre la que se emite cuando deja patente un rastro de obligada afinidad con la retribución. Por eso, desde que apareció el fallo del fallo de las setas, puede advertirse que los afines escriben y describen  unas supuestas bondades, por el momento desconocidas que deben de ir aparejada a los emolumentos, pero que no acierto a cuando menos intuir en la maqueta que se nos muestra.

Tal vez por los motivos de libre profesión también se vierten opiniones y comentarios acerca de lo que está por ver si puede ser realizado desde una realidad que puede verse a nada de asomarse un poco al solar, y que  en estos casos comparto. Es el complejo de Jano de la callada mariana, la muy difícil, que siempre se hace presente. ¡Ay Alameda!

Por eso, con la misma capacidad conocimiento, responsabilidad, y respeto que se merece toda opinión, no deja de ser sorprendente que el incomprensible gasto de 58 millones de euros en setas, algo así como diez mil millones de las antiguas pesetas, que no es cosa baladí, para que se empleen en una epatante cubierta, a menos que se esta erija a mayor gloria de sus mentores cosa que es de temer, como un recuerdo ad eternae, lo cual parecería dilapidar el escaso erario publico, pues en todo caso hubiera bastado con una plaquita de alpaca paras colocarla en el mueble bar para enseñar a los amigos y si acaso un busto al gusto hispalense de la betica , o en su defecto polaco, visto el éxito obtenido en la muestra o lo que sea que adorne cualquier recoleta placita.

Desde luego que gustaría confirmar que es lo que mueve  a los defensores de la propuesta micologica para que esta tenga por ellos una defensa a ultranza y sin concesiones, y sin que puedan explicar una, solo una de las bondades que dicen, y uno, uno solo de esos muchos beneficios que nos reportarán los diez mil millones del ala de la inversión.

Pero no bastará decir que bonito, que es atrevido, o que es original diseño, como el de la gasolinera de Hannover. Sería suficiente con una cualidad que justifique tanta sombra, para que la adversa opinión, pueda cambiar antes de que al parecer, es ya imposible dar marcha atrás, y se tenga que soportar el espanto que causará aunque se aplauda, ver aquello al menos hasta que el ojo se acostumbre, junto a un encendido rubor y algo mas que vergüenza cuando se cierren las cuentas. Y es que en el fondo no somos tan moderno como para resistir tanta vanguardia, aunque a decir verdad el plato, es el plato, y eso si que es una justificación de peso.

Sevilla a 9 de Marzo de 2007

lunes, 18 de marzo de 2013


He encontrado algunos archivos antiguos, este lo edito en el blog, al objeto de que tenga la merecida  difusion.
En el contaba la visita de una comitiva politica que trajo hasta mi puesto del mercado provisional al mismisimo Sr. Viera, acompañado de Bernardo Bueno y de Nieves Hernandez un trio solicitandome
 el voto,  al objeto de continuar, como asi sucedió, ejerciendo la politica como servidores publico, y usted que lo viera.



Usted que lo  viera
La política es un arte que solo muestra lo que le interesa al ejerciente en nomina, escondiendo lo que no conviene que por real se viera desvirtuado.
Como una batea de coro gaditano, con su cuplé y su tipo, llega a la plaza de abastos esta para que se “viera” lo que había que ver, y para eso nada mejor en este carnaval que placear la comitiva por esta tan céntrica, como provisional, con su disfraz de setas esperando y su cubierta del antiguo régimen aguantando el transito.
Subidos al carro, una veintena de figurantes arropando este primer contacto de quien encabeza la procesión petitoria, aun a costo de tener que escuchar lo que al parecer desconocía de toda esta historia de arrinconamiento, para que se viera, en esta ocasión, de que todo el monte no es orégano, lo mismo que lo de las setas no es buena idea.
Los refinado modales en su comportamiento, conjugando elegantemente con la impecable chaqueta de lana inglesa, nada de cazadora en esta ocasión sin confrontación, departiendo sonrisa, solicito, “pidiendo” lo que han quedado en llamar una nueva “herramienta” para trabajar. Una frase utópica, “pon a un político a trabajar”, cuando lo mejor seria a veces que se quedaran quietecitos, que no parados, allí sentaditos en el lugar que le asignaran, pues al menos no cometerían tantos errores, en ocasiones, del tamaño de las setas de esta Encarnación, que no hace falta ni verlas para hacernos a la idea.
Debió de ser el fidelísmo lo que le causó esa confusión, pues de la buena intención de lo de mercado emblematico prometido por el doctor, se pasó a esto que, por el simbolismo que se desprende, hizo imposible una negativa a lo de las setas, puesto que podría haber sido interpretado,y se "viera" dentro del propio ámbito del partido de entrenamiento, que estas no se alentaban en un periodo en las que están siendo todo un referente.
La comitiva se detiene en el interior del decrepito mercado de abastos, objetivo para el paseo matutino por este espacio municipal, hasta ahora desconocido para la mayoría de sus componentes, que absortos, no dan crédito a lo que están viendo. Tal vez contemplan la magia que aun emana en este que tiene los días contados, y que pudiera perderse de acabar de la forma prevista con su eterna provisionalidad, aunque se “viera” tantas carencias.
A pesar de que se acompaña por el dirigente de la broma de los cien kilos, se advierte en las palabras de liderazgo, un desconocimiento general del tema, y promete volver cuando se entere, para el tiempo de los preparativos del próximo camino, que acabará como una romería. Con esto, una de dos, o en su entrenamiento lleva el dominio de las artes histriónicas, o lo que será peor, que si llega, lo hará demasiado tarde.
En la Encarnación, mal que nos pese, todo le llega tarde, y cuando no en la oposición, lo que significa, que el capitulo de buenas intenciones políticas, hasta ahora, siempre le resultaron baldías, pero aunque nos parezca demasiado tarde, llegará el día en que todo cambie. ¡Ojala, lo viera!
Francisco Rodríguez Estévez
Sevilla 16 de Febrero de 2007-
(La final en el Falla)


Coincidencia

 

Se da nuevamente el caso de que cuando un medio local trata de prestarme su ambó  para que mis palabras se puedan sentir incluso en lo más lejos, en lo más grande, y en lo más alto, casi que fuera un lema olímpico de tal disparate, la Encarnación vuelve a estar en el candelabro.

 Ocurre que un canal de televisión alemana, me solicita para que forme parte, creo que de un documental que vienen a realizar sobre las setas. Ni les cuento  que estos teutones viene directo al grano, y es que les han facilitado, no solo mi nombre, incluso mi teléfono y el mail, lo cual quiere decir que ha debido de ser  por alguien que me conoce.

Como no puede ser de otro modo he accedido a colaborar, y no me importara decir  todo lo que pienso de esta Encarnación descarnada, a la que en otra ocasión tuvo a bien filmarme otro canal de televisión, en este caso era finlandés, y después de una hora de grabación, largando todas y cada una de las “bondades” del polietapico proyecto, apenas recogieron 10 segundos de mi amplísima intervención,  en el montaje final de un documental de 35 minutos.

Cómo pueden imaginar, se me quedó esa carita que queda cuando visualicé la copia que tuvieron la gentileza, y el detalle, de enviarme.
Al menos se me puede oír decir” es como un templo para los sentidos”, refiriéndome a mi concepto de mercado de abastos, que dista mucho de esta cosa que nos tocó sufrir.

Sin duda esta Encarnación es para sufrirla, apenas tiene la alegría y el bullicio de plaza, y poco son los días para disfrutarla.
Ya se verá, si coincide la grabación alemana, con la participación en el  medio local al que según parece le interés mi opinión al respecto, de todas formas solo variará en la extensión de tiempo que disponga.

Creo que, para no dispersarme mucho, ni hacer digresiones que puedan resultar de dificultoso entendimiento, y también para no atropellarme en las intervenciones, solo me centraré en lo de la puerta, y dejaremos descansar a la diosa Ceres, y omitiremos como al lucernario tendrá que nuevamente que colocarle alguna medida de seguridad sin que sea nuevamente quien tenga que hacer la observación, al Ayuntamiento, a la concesionaria, incluso al hermano mayor de la Macarena, y salga de motu proprio de alguna de las responsabilidades. De la escalera nada, de los olores nada de nada, de la fotovoltaicas, y la fuente, que no salga palabra. Solo que se abra la puerta. Effetá.   
Nada tendría que añadir a esta puerta que debería de abrirse, in ictu oculi, con un fregolismo que trate de olvidar si era ábrete sésamo, las palabras que abría la puerta, o acaso fuera effetá lo suficiente como  para abrir los ojos ciegos de los que no quieren ver como se abre la puerta, por descontado automática.

Sevilla a 18 de Marzo de 2013

Francisco Rodríguez Estévez

domingo, 17 de marzo de 2013

La construccion de un sueño

(en la ciudad de las personas)

La callada, en su silencio, permanece dormida mientras descansan los debates, papa, o bistec.
 La privatizada plaza de la mayor indignacion acoge a los indignados, a los filosofos, a los de la tercera edad, a los marginados.
Alli se muestra, como camellos, tambien los funcionarios que toman el cuerpo como disfraz carnavalesco, no en vano el doctor salio por la puerta falsa el día que quiso salir por la que a modo de decorado realizaron para acelerar la apertura de una de las fases que dispusieron para que el polietapico complejo multifuncional pudiera servirle tambien como punto de partida a una elecciones perdidas de antemano.
 
 
 
 
 
 

viernes, 15 de marzo de 2013









Siempre la Encarnación

 

Siempre ocurre. El caso es que no hay foro, mesa redonda, reunión o conferencia, a la que asista que no se acabe haciendo referencia a lo de la Encarnación. No más Encarnaciones.

Aunque en la mayoría de las intervenciones, ya sea en el discurso del orador, en la propuesta del debate, o en la opinión de algún oyente,  sucede por lo general que ahora se está abiertamente  en desacuerdo con estas setas de la Encarnación, pero lo peor, es que tanto los discursos (a seta levantada), y las opiniones (con el gasto hecho) ya no sirven para nada.

Me pregunto en que estarían pensando tantos adalides y aparecidos, cuando por ejemplo se empezó el pilotaje para una cimentación inservible, que se llevó a cabo con el visto bueno para desmontar todo lo que  apareció de la Hispalis. 7 de julio San Fermín.

Aun hubiera dado tiempo para evitar la invasión micologica, que en opinión leída en algún medio se llevaba a cabo con todos los vistos buenos, aun sabiendo que existía un informe que desaconsejaba realizar semejante proyecto tan como estaba premiado, lo cual hubiera evitado que la actuación llegara  a toda costa, y a todo costo, y de paso soslayar la Ley FERAEE, la de Patrimonio Histórico, y el propio Reglamento de Mercados en vigor.

Al igual que la torre que no podía realizar, por mas que fuera un estertor, la entidad que finalmente ha sido tragada por esta que nos llegó desde la décima provincia andaluza, por el número de habitantes charnegos, (pues siempre anotamos como la novena la que doblega al Guadiana, y lo hace frontera propia, con el plan de regadíos del tiempo del silencio). Tiempo para crecer.  Otro tiempo. Toros en Olivenza. Corrida Pinzoniana en Ayamonte. Allí  Boixos Nois, pies para que os quiero.  

Lo lógico hubiera sido poner de acuerdo a los distintos grupos de poder efímero, y con el poder de las instituciones, junto con el patrocinio económico ya sea andaluz de plena autonomía, o por referéndum, aunque tampoco sea este tu referéndum, andaluces levantaos.

El caso es que son muchos los debates ciudadanos en esto de la fabrica de carabelas, naos y galeones, en especial, si se descubre el suelo en tu totalidad, o solo una muestra, si se restaura, o se rehabilita, si la intervención del BIC, con máxima protección tiene que se la que disponer la Ley, y no la interpretación de la misma, o por el contrario, si se procede a llevar a cabo una actuación de acuerdo con los nuevos tiempos, tanto en materiales, como en su utilización con ampliación de metacrilato incluida.

Todo viene a ser como otra Encarnación, ¿Dónde está el dinero? ¿Qué usos se le asignaran a otro nuevo polietapico y multidisciplinar proyecto?

¿Museo?, No se, basta ver la afluencia que tiene la pinacoteca hispalense para tomar semejante decisión. Museo de carruajes, ha sido otra de las “ocurrencias”, todas en general, incluida la del negocio encubierto de lo que llaman  hacer “Xaforum”, con bebida y música incluida, y si me apuran un teatro, o salón de actos, y eventos, pues la verdad para tal contenido no hacia falta tanta Atarazana. Reales Atarazanas, siglo XIII.

Con la cantidad de lugares que pueden hacer estas actividades o propuestas ludicas y museísticas existentes, de facto en lo de las setas tanto en la plaza de la mayor indignación como en la zona donde la Hispalis fue desahuciada, se llevan a cabo.

Incluso en la misma casa donde Ceres permanece secuestrada a la espera de retornar a la Encarnación para dejar de ser un monigote de fuente, una pieza escondida de las miradas, y volver a ser admirada por propios y extraños.

Acaso las fabrica de barcos, la de artillería ,y si me apuran la de vidrios de la Trinidad, tienen que ser espacios vivos, lleno de actividades y colmatado por el publico a tenor de sugerentes propuestas, a nivel mundial, para nada pueden ser convertidas en elementos contenedores, como panteones de un mundo muerto,  como en su laberinto quedó atrapada y travestida esta Encarnación , puerta, puerto plaza mercado estación….. cuando solo es poco más que un lugar de copas. Si bien es cierto que esta si al menos tuviera una salida sostenible, generaría las entradas suficientes. Puerto y puerta.

Sevilla a 15 de Marzo de 2013

Francisco Rodríguez Estévez

jueves, 14 de marzo de 2013


De paso

 

En los silencios de la malaventa se hace mas patente la guasa. ¿Pero donde “coño” pusieron la puerta?

Con la excepción de los forasteros, que por lo general buscan jamón en lugar de puerta, se diría que casi la totalidad de cuantos aciertan a pasar por allí lo hacen buscando la puerta, en estas ocasiones para la salida, y ni les comento los aspavientos de aquellos que en vano intento, por entrar, desisten de hacerlo.

Tiene el personal, en la edad dorada, el punto graciosos y mas de una ocurrencia rayando lo borde, pero es que puedo entenderles sobradamente en su indignación cuando tratan de salir de un laberinto, y en la desorientación propia de la senectud, viene a caer en el lugar que la lógica les hace intuir, y mira por donde, justo en el idoneo sitio para la broma del alemán que si pensó en las risas, y los palmeros del teiton, en modernidad, el medico en icono, y sus adeptos, en vanguardia, los oponentes en patochadas, y los placeros ni se enteraban de que iba la cosa, salvo lo del cuento  del cero pesetas. La adjudicataria soñaba en los miedos con la tontería, la constructora con los cambios del capricho, urbanismo con las maderas, y consumo, con el mimo, pues no podrían ni decir palabras, acaso ni las tuvieran.
Con todo eso, a nadie se le pudo ocurrir que si aquello debería de ser una superficie comercial, sinergia o locomotora, se le tendría que facilitar la entrada al publico, obligatoriamente con puertas automáticas, y en su interior colocar  las señalizaciones tanto de salidas, como de los servicios, lo suficientemente a la vista para que se facilite la información.

Ante la ausencia de publico, que por muchas causas se aleja, muchos mas días de la cuenta  de esta plaza de la Encarnación, rara, rara, se hace mas evidente que algunas ni llegaron a pasar al interior, sencillamente por que no encontraron la puerta, y,  aunque posiblemente fuera solo por recorrerla en su interior,  seguro que almenos podrian darle el punto de bullicio y cosmopolitismo que tan bien viene para crear ambiente de ventas, pero ocurre que muchas personas en llegando al cristal, y comprueban que allí no hay ninguna puerta, en la mayoría de los casos abandonan el empeño.

En el silencio, los que buscan la salida expresan sus opiniones al paso, y en ocasiones, suele suceder que  se acuerdan del alemán, otros son más extensivos, y me preocupa tener que pasarme toda mi vida escuchando, de paso, lo que ni los destinatarios se merecen.

Sevilla a 13 de Marzo de 2013

Francisco Rodríguez Estévez

martes, 12 de marzo de 2013


Aromas en el MOMA





Trato de intentar, después del tiempo transcurrido, poder entender una de las muchas frases-perlas que nos dejo el anterior alcalde. Pudiera ser que aquella de lo del mimo se lleve la palma, pero es esta trato de desentrañar en su misterio de la Encarnación de que lo de las setas quedara integrado en el paisaje como algo propio, y que las llegaremos antes que tarde a quererla hasta el punto de identificarnos con ellas. Su contundencia nos hace valorar el vaticinio.
De todo solo saco en claro lo de plaza de la mayor indignación, a menos que cuando dejó caer la lapidaria de que quedaran integradas en el paisaje, lo mismo temía que se cayeran, o que pudieran liquidarse como si de un Moneo, o un biblioteca se tratara. ¿Prado, o Alameda?
Como dijo el concejal en Nueva York, justo donde el buffet de perniles de Aroche hizo las delicias de la critica, es lo que hay, y allí permanecerá hasta que se caiga, que según se estima por algunos expertos no será de larga vida, por lo que la integración quedará en continua contaminación visual tanto del BIC de la Anunciación, como la afectación total a la fuente mas antigua de la ciudad. Miel, mistela, leche, y aguardiente, fuente de la Encarnación.
Otra cosa es lo de quererla, y no se hasta donde nos podemos sentir identificados con un proyecto que ni es sostenible, pues no colocaron las células fotovoltaicas obligatorias en los edificios públicos, e incumple la Ley de accesibilidad de las personas con discapacidad, y que no tiene estación para el metro futura línea 2, estación Metropol, ni para el tranvía.
Basta ver el pavimento tan desacertado que colocaron que a diario aparecen losas destrozadas y las fuentes bultos aun están por lanzar una gota de agua de sus surtidores, y en la noche que enciendan las luces.
Lo mismo ese cariño, solamente hacia el mercado, puede que me llegue mas bien tarde, pues no parece que tengan ninguna urgencia por hacer algunas modificaciones dentro de lo posible, pues son demasiadas personas las que buscan una puerta donde no la dispusieron, y por dos años en impasse hace temer lo que le importa a la responsabilidad, ya sea junta o por separado.
Que la escultura de la Diosa Ceres no regrese a la Encarnación, marca el tiempo, la metodología y las ganas, en las distintas áreas, así como también el dinero, que por el bajo costo, cabe suponer que no faltarían patrocinadores.
Sevilla a 1 d Febrero de 2013

domingo, 10 de marzo de 2013



La modernidad

Inauguración

Monteseirín augura que el Parasol formará parte de la 'Sevilla eterna'


El alcalde asegura que dentro de un año los beneficios de las 'setas' habrá superado el gasto de 123 millones de euros · El Ayuntamiento califica el proyecto de Mayer como el arranque de la Sevilla del siglo XXI.

"El Metropol Parasol será cantado como uno de los símbolos seculares de la Sevilla eterna". El autor de esta frase es el alcalde de Sevilla, Afredo Sánchez Monteseirín, que ayer protagonizó la inauguración del proyecto que ha cambiado la fisonomía de la Plaza de la Encarnación y al que aún le quedan varios meses de obras para rematarlo.

Habló del riesgo y la apuesta por la modernidad, hizo un repaso breve por la historia "poco edificante" del enclave transformado y no desaprovechó la ocasión para hacer un guiño a esa "sevillanía rancia" invitándole a que asumiera como propias las setas.

Defendió el riesgo como medio de éxito. "No arriesgar es el mayor riesgo", dijo el primer edil hispalense, quien lanzó un dardo a los sectores más conservadores de la ciudad al repetir parte de un discurso pronunciado por el presidente ejecutivo de Abengoa, Felipe Benjumea, esta semana: "Pretender vivir mirándonos a nosotros mismos y hacer lo que siempre hemos hecho es estar lejos de la realidad". Justificaba así un proyecto que se abre casi cuatro años después de lo previsto, que se ha encarecido un 70% hasta alcanzar los 123 millones de euros y del que se ocultó durante tres años un informe que lo consideraba técnicamente imposible. Monteseirín habló de estos conceptos, pero pasó por ellos muy de puntillas, como simples matices de una gran obra que supondrá un revulsivo económico para el sector norte del casco antiguo: "No ha sido fácil [...] Hemos sufrido muchos problemas de muy diverso tipo, constructivos, de acopio de la madera, económicos... administrativos. Pero lo hemos superado porque el proyecto lo merecía, porque Sevilla lo merecía y ahora nos alegramos".

Sus augurios -para cuando él ya no esté de alcalde- superan todas las previsiones. Monteseirín confía en que "los beneficios económicos del Metropol Parasol superarán en un solo año a la inversión acometida", frase con la que, en cierto modo, hace responsable a su heredero en la Alcaldía de la buena gestión del recinto. Todo un reto.

Agradeció a sus colaboradores y simpatizantes el apoyo prestado estos años. Y envió un mensaje a sus detractores: "Quiero pedirles perdón a todos aquellos que sienten que Metropol Parasol arremete contra su visión de lo que ellos entienden como sevillanía. Sólo decirles que no tengan miedo a cambiar". De propina les dedicó un poema de Juan Ramón Jiménez. Y acabó por asegurar que en ese mismo momento se inauguraba "la Sevilla del siglo XXI", a la que decía adiós como alcalde.

De un articulo de Diego J. Genil, Publicado en Diario de Sevilla
 



setas




Por el Poniente. (Puerta Ceres)


En el atardecer puede observarse como el Sol trata de ocultarse no sin antes pasar al interior de las descomonules setas en el desierto como calle sin publico, y despedirse como dios Rá , nada menos que de la Ceres que hasta en el desierto lo es de la abundacia. "O-asi-s"e desprende de la vista que nos ofrece las setas del desierto.
Se da el caso que esta edificacion de 2004 ya no era moderna, aunque posiblemente inspirara mas que un cemborrio de la metropolitana, y no digamos nada de una higuera que precisamente muestra las raices aereas colgando donde no pudo ser modernidad de jade y marmol como pretendian  recordar los origenes blanco y verde.
Tal idea no fue cosa agradable en el talamo politico del momento, al parecer lo suyo era dejarse de tonterias oniricas y emplear las losetas de barro de toda la vida y enlos perfiles azulejos decorativos en cobalto y blanco que son los tradicionales para bancos de plaza. Lo que son las cosas.
A poco, el medico cambió de opinion a nada que encontrando otros acompañantes en la toilette del hotel, y mira por donde le toco a lo de la Encarnacion, ¡Ay Alameda! el capricho pero con escaleras. Algo que a semejanza del mirador de ballenasque gozaba de patrocinio alla por el Pacifico, el antojo hizo que este mirador fuera de vistas socializadas, lo que se dice de buen ver, aunque dejara vacias las arcas, pero al menos tuvo en los numeros (rojos por supuesto) el vaticinio de que, en menos de un año, esto generaria tal riqueza, que rianse de lo que han ganado, en comparacion de beneficios, los bancos este año con motivo de la crisis.
En la tonteria, una barreduela de cristal situada delante del peligroso agujero-lucernario  a nada de bajar la escalera bifurcada por la seta dos, y que en la actualidad se encuentra impidiendo al publico el uso publico del espcio publico, no tiene entrtada, solo salida de la basura.

sábado, 9 de marzo de 2013



Desde Regina, hay que adivinar donde se encuentra la sinuosa calle cubierta. Lo cierto es que si está, se esconde tras el enorme estipite, es lo que llaman puerta Norte, para nada es una prolongacion de la 5ª Avenida de Nueva York, pero al menos dispone de cuatro entradas (por mas que solo abran dos hojas) para acceder al llamado Mercado de la Encarnación. (Tambien le dijeron sinergia, y locomotora)
Con seguridad las podrían haber instalado con algún criterio, pero todo nos hace indicar que lo dispusieron aleatoriamente, pues no se explica que las dos que tienen por mas cercana la llamada puerta Sur, están colocada a menos de un metro de iniciado el recorrido de la calle cubierta. En cambio, las del otro lado las colocaron a quince metros del la entrada de la calle. No se pregunten nada, pues ni tan siquiera coinciden las cuatro puertas con las cinco travesías del viario interior, donde no se sabe porque circunstancias a tres no le coincide ninguna puerta y en cambio a una le tocaron cuatro.
Ni por un momento piensen que pueda llevarse a cabo ninguna rectificación, ni por facil que esta sea, al objeto de mejorar los accesos e igualar las posibilidades de cuando menos para que todos los puestos puedan ser visto por el público aunque fuera de paso.

Hoy he tenido noticias directas acerca de la puerta que el público no puede encontrar por más que la busque. Eran noticias poco halagüeñas, por cuanto viene a confirmar el rumor existente, lo cual hace temer que se pueda cumpir, en cuyo caso es para lamentar que la puerta se procederá a colocarla, según lo pidieron los placeros.
Todo parece indicar que si los placeros piden tal cosa a las dos responsabilidades en este asunto administración y concesionaria, estas lo acatan de tal suerte, que ciertamente el lugar elegido fuera algo indiscutible y constatado, que además de facilitar la entrad y salida al mayor numero de personas que solo pueden llegar por Regina, justo por donde nos aparece la escondida puerta Norte, que solo es visible al llegar al parterre del pie de la seta uno.
Quiere decir que unas personas pueden seguir haciéndolo por esta calle cubierta, y de colocarse en un nuevo desacierto en el rincón,lo harian otras, por lo que solo dividiría las opciones del mismo publico, en detrimento de la calle comercial, y seria imposible que esta puerta del rincon, dando acceso en un viario de los llamados punto ciego, pudiera optimizar el recorrido, que de colocarse en la travesía central evidentemente, a poco de aplicar mínimamente el sentido común junto con el de la orientación, beneficiaria a todos los placeros de una manera general.
Lamentaría que se pusiera esta puerta del rincón, cosa inaudita, por el hecho de que lo pidan los placeros y no se tenga un estudio técnico, que es lo menos que se le puede pedir al responsable de la administración, que son varios, mercado, urbanismo, casco antiguo, y muy especialmente a los técnicos de Sacyr, concesionaria-adjudicataria, que como mínimo deben de tratar de mejorar todas las instalaciones del extraño mercado municipal, cuando menos para corregir deficiencias, y revalorizar el espacio, por un largo periodo de gestion, y que por el momento ya muestra indicios de decadencia.

Si el rumor toma cuerpo y los responsables colocan la puerta en semejante lugar, la Encarnación se puede ganar por meritos propios el derecho a cambiar de nombre, pues en lugar de los horrores, convendría decirle de “los errores” (en este caso intencionado)

viernes, 8 de marzo de 2013







Errores y aciertos

 

El caso es que hasta la fecha, y después de mas de dos años comprobando día, a día, los muchos errores que a simple vista pueden advertirse en lo de la Encarnación (donde mas de ciento veinte millones se emplearon) sin que por el momento se lleve a cabo ni una sola actuación que pueda subsanar en lo posible, y mínimamente,  alguno de los mas notorios.

Si soslayamos los grandes errores, los de bultos, los que se consintieron desde la responsabilidad, y la oposición y otros estamentos, por cuanto eran de obligado cumplimiento por leyes, normas y reglamentos. Si nos olvidamos de los técnicos, elección de materiales, puente sin seguridad, vulneración de las alineaciones medievales, fuentes bultos, y  no hacemos referencia al aprovechamiento comercial del multidisciplinar “conjunto”, eso que ni es locomotora, ni sinergia y que tantos bares ha hecho proliferar en zona anteriormente calificada de saturada de bares y ruidos, nos quedaremos en que nunca esta premiada idea, estuvo, ni tuvo, priorizando los usos que en el concurso, (puerto, puerta, plaza, mercado, estación, aeropuerto, plaza mercado, puerta, y puerto) se le exigía a los participantes.

No hace falta ni ser entendido, simplemente hay que pasar por donde arrancan cualquiera de las llamadas setas, y nos aparece la chapuza. Pasear por el camino en la nube, (que de esta forma se dispuso llamar al pasadizo metálico) en estos días de lluvia es un eminente peligro de resbalón continuado, y ni les cuento en cuanto tengamos las temperaturas propias del buen tiempo, pues siendo el hierro además de buen conductor del calor,  también acumula durante horas, sin fotovoltaicas para aprovecharlo, y no intenten acabar el recorrido a esas temperaturas, bajo el riesgo de quedarse pegado en la pintura derretida.

Suele pasar cosa semejantes, o parecidas, cuando no se proveen las que determinaran el uso y jugando con tantos millones hay que improvisar para acabar el caprichoso icono, con su poquito de ruina a salvo, y la otra, pendiente de pago, para que quede claro el interés cultural.¡Mas madera!

Si llamar plaza a la azotea ya causa la mayor indignación, y a la bifurcada escalera de poniente le ponen vallas con la clara intención de que el publico no  pueda hacer uso de lo publico, no me queda otra que llamar plaza municipal de abastos a lo que tenemos, y que por suerte la sacamos del sótano que le tenían previsto otras corporaciones, con aplausos de placeros.

Ya me hubiera gustado que se hubiera buscado un buen emplazamiento para la escultura de la diosa Ceres, al objeto de terminada la provisionalidad, hubiera vuelto también con los placeros a la nueva Encarnación. Pero todo parece que para esta foto los responsables no están por la historia, ni por la cultura, ni por poner en valor una barreduela de cristal en la que como incautos, a diario, demasiadas personas buscan una puerta para poder entrar, y otras tantas intentado salir del laberinto.

Cierto es que existía una calle en la curva Sur, que permitía llegar de un lado a otro, era una especie de travesía rara donde las haya, incluido en Alemania, pero ha quedado convertida en un plis plas, en un nuevo bar en la zona, prueba de que cuando quieren el fregolismo hace su aparición en este lugar, al que también llamaron saprofitismo urbano.

Pero de todos los errores el que se hace más palpable por cuanto es el público el que lo advierte, y con seguridad las cajas de los placeros palmeros, es sin lugar a dudas, la aleatoria disposición de las puertas. Cuatro están situadas en la calle sinuosa, y solo abren media hoja, dos en el lado contrario, quedando, por este capricho, que no tuvo el menor rigor ni estudio en lo que se refiera a la circulación interior de las superficies comerciales, un gran desajuste que crea beneficiados y damnificados, cuando se ha pretendido, sin fundamento, la unificación y participación sin desigualdades, pues tanto la travesía central, vía de mayor importancia no colocaron puerta alguna, la calle exterior queda sin circulación de publico y el ángulo nordeste, totalmente fuera del ámbito de la afluencia del publico, la desértica calle de poniente, sin que pase un alma. Bueno pues con todo no existe ningún indicio de que estos responsables quieran ser sabios, ya que no están por el momento dispuestos a llevar a cabo la mas minima rectificación.

No dejo de preguntarme ¿en que estarán pensando?

 

Sevilla a 8 de Febrero de 2013-

Francisco Rodríguez Estévez